En hora de almuerzo me encontraba en plaza María Luisa Bombal de Viña del Mar y me tocó ver una triste escena. Un niño (no muy pequeño) tiraba pan a inocentes palomitas que a esa hora buscaban qué comer. Cuando éstas se acercaban, el niño las pateaba y su madre sólo parecía disfrutar del espectáculo como si estuviera en la mejor de las obras teatrales.

Qué desgracia tener habitantes tan indolentes con tan inofensivos seres. ¿Debemos dejar todo a la justicia divina?

Afortunadamente una señorita se atrevió a encarar la situación.

Rita Cánepa B.

El 27 de abril estuvo de aniversario la mejor institución de nuestro país, Carabineros de Chile que por unos pocos descarriados la están pasando mal en su cumpleaños, pero eso no empaña sus 90 años de sacrificios a toda prueba y sus mártires que son más lamentablemente que estos que ensucian su labor, yo como ciudadano común confío plenamente en ustedes y les deseo de corazón que sigan en sus labores pues somos muchos los que los queremos y respetamos. Muy feliz aniversario.

Los sismos menores en días previos al temblor más fuerte del martes 24 recuerdan una situación similar que registró "La Estrella" a fines de febrero de 1985, cuando señaló que las oscilaciones de la cabeza de Cristóbal Colón en el monumento de avenida Brasil cumplía funciones de sismógrafo. En realidad, la nota humorística aludía a la falta de personal y pobreza tecnológica que afectaba entonces al Servicio Sismológico, como lamentablemente se comprobó a raíz del terremoto del 3 de marzo de aquel año.

El balance positivo de la reciente emergencia debiera incluir información del estado de desarrollo y cobertura de la red nacional de estaciones sismológicas en conexión

Manuel Sepúlveda Méndez.

Eduardo Reyes Frías.