Guillermo Ávila N.
Estoy de frente a un espejo tan ancho como la pared que ocupa. El fotógrafo y quien escribe son observados al reflejo por el ojo experto de quienes han visto suficiente.
Hemos llegado temprano por la garita oriente que comunica al Congreso Nacional en calle Victoria. A lo lejos, se escucha sobrevolar un helicóptero. De cerca, el escenario resulta desconcertante. Comenzamos a andar.
El recepcionista ensaya sonrisas a la revisión mientras pasamos de lleno al hall. Aún nadie alza los puños, ni gesticula consignas o aplauden a rabiar. Los decibeles vibran al bajo voltaje, en sintonía con la marcha convocada a esa hora. Custodiada a fondo.
El acceso está flanqueado por tipos serios de corbata que parecen sacados de la película Hombres de Negro. Afuera -y por pantalla- a ambos lados de la alfombra roja van arribando esos 900 invitados que avanzan como si estuvieran en Cannes. Flashes, una inédita carpa y personal del Gope apostado hasta en las escalinatas. Los primeros en llegar: el senador de RN Francisco Chahuán y su colega socialista Carlos Montes. Atrás le sigue aquel fiscal de la pinta medieval, Pablo Gómez.
El recinto a las 10 de la mañana está abarrotado y reina un clima de expectación, como si se tratase de un partido de fútbol, pero que en realidad pudiera ser de polo. La gente busca sus butacas. Como en el cine, se escuchan a honorables con celulares pegados a la oreja. También clásicos saludos del tipo, "qué bueno verte" y sonoros apretones de manos. No hay ideología que valga: uniformados, ministros, eclesiásticos, políticos... a Los Jaivas, "Todos juntos".
Así, por ejemplo, una elegante Andrea Molina (diputada Udi) -ataviada en un vestido crema-, se saluda de beso con Hugo Gutiérrez, su "par" comunista. O Jorge Sharp, alcalde porteño, sin corbata, departe a las sonrisas con la "Tía" Coty. De protocolo.
Abrazos al lujo
El estilo que impera es homogéneo a la ocasión: trajes, vestidos, peinados y cortes de cabello resultan inmaculados. Exclusivos. Así como perlas, plata y oro que destellan en aros, anillos y relojes. "¡Qué lindo el vestido de la Pepa (María José Hoffman)!", comenta una invitada. La grandiosidad que rodea el acontecimiento está justificada: es el último balance de cara al país que realiza la Presidenta Michelle Bachelet. Su octava Cuenta Pública. La despedida. La mujer orquesta de la jornada entra con la Tricolor sobre su sobrio traje azul para el vamos a la ceremonia. Toma la palabra. Y entonces, casi dos horas de función. "Queridos compatriotas. Vengo a dar cuenta ante mis conciudadanos de la marcha de nuestro país. Un país que se transforma, que progresa...". Y el primer estruendo a los aplausos: "A pesar de la prolongada desaceleración económica, desde marzo de 2014 se han creado más de 300 mil puestos de trabajo y la tasa de desempleo ha promediado 6,5%". Eso hasta que el teleprompte -en su debut- falla a la Presidenta. "Sigamos", salió al paso.
Reacciones on fire
Ya a la salida, opiniones. Francisco Chahuán (senador RN): "San Antonio y un terminal 3 para Valparaíso siguen esperando. El plan de descontaminación para Quintero, Puchuncaví y Concón, no dan el ancho". Jorge Sharp (alcalde de Valparaíso): "Faltaron anuncios concretos, como la Ley Valparaíso: que el Puerto tribute". Andrea Molina (diputada Udi): "Plan de Puerto, conectividad, el tren Calera - Quillota : un nuevo estudio, llevamos cuatro. Me voy con gusto amargo". Ignacio Walker (senador DC): "Bien para la V Región: embalses, el hospital de San Antonio, extensión del metro de Valparaíso a La Calera, inversiones de cientos millones de dólares que van a traer prosperidad para Valparaíso. Sin embargo, faltó tocar el tema de los campamentos, con cinco mil familias en Viña del Mar".
Manuel Ossandón (senador): "Un discurso muy bonito: parecía otro país". Rodrigo Valdés, ministro de Hacienda: "La creación del órgano independiente que administrará el 5% extra de cotización -con cargo al empleador-, en el marco de la reforma de pensiones, requerirá un cambio constitucional".
Lily Pérez (senadora): "Lo que se habló de la v Región no se ha concretado: hospitales, ferroviarios, seguridad ciudadana, puertos... que no se mencionó nada. Una Cuenta Pública para sus partidarios".