Manuel Gómez Poblete

Con una trifulca de último minuto, resultados más bien lógicos y una tibia y tardía reacción del VAR (que no sugirió expulsiones, luego de una semi batalla campal entre aztecas y neozelandeses), finalizó ayer la segunda fecha del Grupo A de la Copa Confederaciones 2017.

A primera hora en el Estadio del Spartak, en Moscú, el local -Rusia- no pudo imponer sus términos ante el campeón de Europa y terminó cayendo frente al pragmatismo de Portugal, por 0-1.

Bastó un error en la marca de Kudriashov a Cristiano Ronaldo (quedó corto en el salto), para que el astro del Real Madrid, con un cabezazo elevado, anotase su primer tanto en Copa Confederaciones, lo que dejó a los dirigidos por Fernando Santos muy bien encaminados de cara a la clasificación, ya que su tercer y último rival será el ya eliminado Nueva Zelanda. Rusia en tanto, quedó con la obligación de vencer a México, para instalarse en semifinales.

Aztecas, sufriendo

En el Olímpico de Sochi, en tanto, México -con un equipo más bien alternativo- sufrió más de la cuenta con Nueva Zelanda, al cual sólo pudo superar, ya bien encaminado el encuentro, por 2-1.

Las críticas al "Tri" pasaron por la actitud del técnico Juan Carlos Osorio, el cual, mirando quizás en menos a su rival, realizó ocho cambios en relación al equipo que igualó en su jornada inaugural con Portugal. Y Nueva Zelanda le pasó la cuenta, poniéndose en ventaja a los 42' a través de un tanto del gigantón Chris Wood.

Tras el descanso, México reaccionó y merced a los goles de Jiménez y Peralta lo pudo dar vuelta en un pleito que terminó con polémica, ya que cuando el famoso "VAR" (Video Assistant Referee) tuvo que intervenir de manera enérgica, no sugirió expulsiones tras una batalla campal que culminó, tras muchos gestos y revisiones del juez Gassama, con apenas tres amonestados.