Manuel Gómez Poblete

Tenía apenas 20 años de edad cuando el ahora ex lateral zurdo de Everton (hoy en Iquique), Nicolás Peñailillo, era enviado a préstamo al Zenit de San Petersburgo, en la Primera División de Rusia.

Era el año 2011 y el zurdo oriundo de Santa Inés -que había debutado el 2010 con los Oro y Cielo, bajo las órdenes de Nelson Acosta- iniciaba una aventura que lo tendría en la filial de uno de los equipos más importantes del fútbol ruso.

Durante casi un semestre, Peñailillo jugó y vivió en la bella ciudad de San Petersburgo, la misma que albergará -este domingo- a miles y miles de compatriotas que llegarán ilusionados a la gran final de la Copa Confederaciones entre Alemania y Chile.

"Me tocó estar como seis meses en San Petersburgo y como todos ha dicho es una ciudad hermosa. Tuve la posibilidad de vivir ahí un buen tiempo y fue algo maravilloso... en una ciudad llena de fanatismo por el fútbol, entre otras cosas. Es una ciudad importante y ojalá que nos de suerte para quedarnos con una final histórica que nos haría muy bien como país".

Si bien no alcanzó a jugar en el Nuevo Estadio Kretovski (el más caro del mundo en la actualidad), Peñailillo conoció los parajes en donde se jugará la finalísima de las Confederaciones 2017.

"Este es un estadio nuevo, ya que cuando yo me vine se hablaba de que iban a construir un estadio para 70 mil personas. Nosotros jugábamos en el estadio antiguo del Zenit que era para 20.000 espectadores... no era mucha su capacidad. De igual modo la ciudad es hermosa, está rodeada por un lago precioso y tiene instalaciones muy lindas. Allá casi todos son del Zenit y viven los partidos intensamente. En la época que estuve yo, eran el mejor equipo de Rusia, de hecho, el 2011 salieron campeones y también han jugado en Europa League y la Supercopa, juegan siempre cosas importantes".

-Hemos visto a muchos chilenos de visita en Rusia. Pero, ¿qué tan difícil es vivir allá?

-Es complicado, pero uno se acostumbra. Cuando me tocó llegar a Rusia habían -15 o -20 grados, era complicado. Pero lo más difícil era adaptarse al idioma, ya que no todos hablan en inglés. Pero más allá de eso, los rusos te hacen sentir como en casa... en el club me trataron muy bien, me dieron la posibilidad de vivir en un hotel y te ayudaban con todo lo que necesitaba, siempre con la mejor disposición.

-¿Aprendió algo del idioma ruso?

-Nooo, cosas básicas. Un hola, cómo estás... cosas así, pero en otras cosas es muy difícil... es como el chino mandarín, así de complicado.

-¿Algún compañero suyo que hoy sea famoso en Europa?

-Algunos portugueses, podría ser. Fui compañero de habitación de Bruno Alves, que hoy está jugando de central con Portugal. Los extranjeros compartíamos las habitaciones y a mi me tocó junto a él. Compartí también con Danny Alves, que fue seleccionado en su país.

-Y respecto a la Selección de Rusia, ¿lograrán algo importante en la Copa del Mundo?

-Es probable, ya que están saliendo hartos jugadores jóvenes muy interesantes. Y están buscando la fórmula para cuando llegue el mundial, tengan un equipo competitivo y que pueda jugar de igual a igual.