Secciones

Listos, los 11 guerreros de la "Roja"

Mañana en San Petersburgo, la iluminada Selección Chilena de Alexis Sánchez, Vidal, Bravo y compañía saldrá a convertirse en el sexto campeón de la Copa Confederaciones. Su rival eso sí, no será cualquiera: Alemania.
E-mail Compartir

Manuel Gómez Poblete

No será la final de una Copa del Mundo organizada por la FIFA, pero sí que se le parece. Y con Chile como protagonista, la expectación -en nuestra angosta faja de tierra... ahora futbolera- es absoluta. Si hasta parece un cuento de hadas o alguna historia proveniente del inocente sueño de un niño. Una final en Europa, con Chile y Alemania como los aspirantes al título, es algo para disfrutar y agradecer. Y que tras años de triunfos morales y cientos de casi-casi... esta "Roja" de Alexis Sánchez, Vidal, Bravo y compañía nos invita a soñar y soñar en grande, ya que la Copa Confederaciones no es cualquier cosa, siendo catalogada por la misma FIFA como la segunda competencia en importancia del mundo, luego de un Mundial.

Por lo demás, no es nada de fácil jugar -y menos figurar- en una Copa Confederaciones, torneo que desde su nacimiento en 1992 (en esos años se llamaba Copa Rey Fahd y se jugaba con una sede fija en Arabia Saudita), ya suma su décima versión con la que está finalizando en canchas rusas.

El país que más títulos posee en las Confederaciones es -quien otro- Brasil (4), potencia que además viene de alcanzar el título en las últimas tres ediciones, venciendo a España por 3-0 en la final de Brasil 2013; a Estados Unidos (3-2) en Sudáfrica el 2009 y a Argentina por 4-1, en Alemania 2005. Antes, en 1997, el Scratch había alcanzado su primera Copa de las Confederaciones en la última versión del torneo jugada en Arabia Saudita. Francia, con sus títulos de los 2001 y 2003, también ha levantado este trofeo. Y los otros campeones don México (1999), Dinamarca (1995) y Argentina (1992), lo que realza el trabajo de nuestra "generación dorada", ya que ni Uruguay, España o Italia, por nombrar a algunas de las grandes potencias históricas del balompié, han podido quedarse con esta competencia.

Campeón inédito

Al igual que Chile, la siempre poderosa Alemania -que hoy en día ostenta el título de campeón del mundo- tampoco ha podido ganar una Copa Confederaciones, siendo su mejor puesto el tercer lugar obtenido el 2005, siendo locales en la antesala a su recordado mundial que organizaron el 2006.