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[Cultura Urbana]

"InmorTal" el testimonio de diez sobrevivientes llega a Valparaíso

Escritora Marcela del Sol presenta su libro, donde víctimas de abuso revelan sus vivencias.
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Con gran éxito, la semana pasada Marcela del Sol, escritora nacida en Antofagasta pero radicada por años en Australia, hizo el lanzamiento en Santiago de su nuevo libro "InmorTal". El evento significó su reencuentro literario con Chile, el país y su idiosincrasia que forjaron su niñez. El mismo donde más de algún sector conservador se escandalizó con su best seller erótico "Caleidoscopio".

En la víspera del primer lanzamiento en regiones de su nueva obra (en la Novena Feria del Libro Independiente que se realizará este fin de semana en el Centex del Consejo de la Cultura), Marcela conversó con La Estrella y contó detalles sobre el libro donde se leen diez historias reales de violencia hacia la mujer. Entre ellas, la propia. Una nueva apuesta que también marca el debut en el ámbito literario de Nabila Rifo.

-"InmorTal" reúne 10 historias reales sobre abuso sexual. ¿Cómo da con esas personas y logra convencerlos para que cuenten lo que les ocurrió, considerando es un tema del que pocos se atreven a hablar?

-Primero debo decir que nace de mi experiencia, porque yo sufrí abuso sexual. Dentro del libro está mi historia y también de Gabriela (Rivera), que es la fotógrafa que colaboró en el libro. Al principio no tenía proyectado hacerlo, estaba trabajando en un proyecto completamente distinto, que era un ensayo de poesía. Entonces, esas historias llegaron a mí de manera incidental, porque lamentablemente es un lugar común para mucha gente, personas que conocía en circunstancias completamente ajenas a mi escritura. No fui cazando las historias, vi una necesidad imperante de tener que contarlas porque veo todavía que la frecuencia con que sucede la violencia sexual, sobretodo hacia la mujer, es horrorosa.

-Desde el punto de vista narrativo, ¿cómo logra la prudencia necesaria para abordar las historias de la manera más fiel posible, pero también resguardando el bienestar emocional de las víctimas?

-En todo momento protejo la identidad de la gente, incluso los lugares fueron cambiados. Es un libro que tiene mucha conciencia de protección hacia la víctima, excepto la historia de Gabriela y la mía, al resto de las personas no es posible identificarlas. Son historias también transgeneracionales, que ves a la víctima cuando se suscita el hecho, y ves el impacto en la vida de ella y en la gente que la rodea.

-Nabila Rifo participa en este libro, aunque no contando su vivencia. Lo hace aportando algunas líneas al inicio del texto. ¿Cómo se gesta ese aporte y simbólicamente cuán relevante fue su aparición en este libro que aborda la violencia hacia la mujer?

-Conocí a Nabila en un viaje a Chile, lo que había pasado con ella. Estuve en Coyhaique con ella y su familia, luego viajó a Santiago y estuvo conmigo. Ella es más que una musa, porque para mí fue una inspiración ver que era una sobreviviente, más allá de ser la víctima. Ella quiso participar y me dijo un texto pequeñito, porque obviamente lamentablemente no puede leer ni escribir. Ese es el texto que abre el libro. Son como cuatro, cinco líneas, donde ella quiso plasmar su mensaje y yo también quise plasmarla a ella, porque quiero que tenga trascendencia en nuestra historia.

-Precisamente hace algunos días se confirmó la rebaja de condena para Mauricio Ortega, ex pareja de Nabila. A su modo de ver, ¿esto genera un mal precedente que podría gatillar desazón entre víctimas de agresión y atentar contra su rehabilitación emocional?

-Es una tremenda revictimización, ahonda mucho más todo lo que ya estamos sufriendo como mujeres. Nosotros vemos la magnitud de un crimen según la medida que se le ha aplicado, y el haber reducido esta condena nos habla tal vez de una incompetencia judicial en Coyhaique, porque es ahí donde no se estableció muy bien el dolo directo o eventual. Eso abrió la puerta para que el proceso judicial o la figura legal fuese establecida de esa manera, como un crimen menor. Si nosotros interpretamos la gravedad de un crimen según el castigo que se le aplica, nos dice obviamente que si hay alguien que está potencialmente tratando de ejercer un crimen de violencia contra la mujer no desarraiga ningún tipo de incentivo respecto a ese pensamiento.

-Considerando su experiencia personal con situaciones de abuso, ¿que un agresor reciba alguna sanción ayuda a una rehabilitación emocional de las víctimas o conlleva más bien un trabajo individual de introspección?

-El abuso sexual es un dolor irresoluto. No es como que a ti te quiten la cartera en la calle; te duele, es traumático, pero lo puedes reemplazar. La decisión sobre tu cuerpo, sobre la sexualidad, que es un aspecto completamente tuyo, sobre el cual tú deberías ser la única persona con control y decisión, es algo que no puede resolverse. Entonces, hay obviamente cosas, circunstancias, personas, que pueden ayudarte a sobreponerte de cierta forma, pero no es algo que pueda sanarse. Mira, yo tengo 44 años y siento esto como una presencia latente. También hay una necesidad de implementar sistemas de apoyo reales, más allá del sistema judicial, más allá del castigo. Pero, el castigo no te quita el dolor y no te devuelve lo que perdiste.

-¿Hemos dado pasos adelante como sociedad en materias de igualdad de género, o más bien, se trata de un avance engañoso?

-Hay avances respecto a que ya estamos pudiendo hablar de ciertas cosas, del aborto por ejemplo, pero no hay realmente avances que posicionen a la mujer de manera ecuánime en la sociedad. Entonces, mientras eso no suceda, el avance es mínimo o nulo dentro de términos prácticos.

-Volviendo a "InmorTal", ¿cómo debiese abordar el libro una persona que ha sido abusada o -quizás- alguien que no lo ha sido, pero que tiene algún cercano que ha vivido una situación así?

-Yo siempre escribo para que trascienda la palabra escrita, no lo hago con la idea de posicionarme en ciertos lugares literarios, ni nada. Escribo porque encuentro que un libro puede darte un lugar común de una manera no invasiva. De esa manera, quisiera que la gente lo leyera, que empezáramos a despertar frente a hechos tan horribles que suceden día a día. Ahora estamos hablando y no me cabe duda que hay violencia ocurriendo en este mismo instante. Para alguien que ha sido abusado, que lo tomara como un lugar común, como un mensaje de no estar sola, y a la gente que tiene sospechas de casos así, que por favor hablen, porque el silencio perpetúa este tipo de comportamientos. Hay que atreverse a hablar.

"InmorTal" y "Caleidoscopio" se presentan hoy en la Feria del Libro Indepediente de Valparaíso a las 18 horas.