El arte bajo la mirada de dos generaciones de la familia Folch
Marcelo Folch y su hijo Hans han seguido el camino del arte desde distintas técnicas, ahora estarán reunidos en una misma exposición.
Marcelo Folch es un destacado pintor nacional, cuya extensa trayectoria lo ha llevado a ser uno de los artistas más reconocidos alrededor del mundo. Nació en el seno de una familia de artistas y militares, es por eso que gran parte de su carrera la ha hecho en homenaje a la Armada de Chile, según el diario regional El Proa.
Su especialidad en obras marinas lo llevó a trabajar por más de 21 años en la institución, realizando obras a petición sobre buques de la escuadra, combates navales, regatas, actividades portuarias, entre otras. Sus pinturas han viajado por el mundo gracias al buque escuela Esmeralda, donde distintas embajadas poseen un Folch en sus paredes.
Sobre los comentarios que ha recibido por sus obras, a modo de reacciones, responde que marinos que han estado en otros países, le dicen que han visto sus obras en distintas embajadas del mundo. "Hace poco me encargaron uno de Grecia", afirma el pintor.
Pinturas marinas
Además imparte clases de pintura en la Escuela Naval, donde dice que lo más importante es estar en contacto con la juventud. Dice que se sigue encontrando con sus alumnos y que aquello se lo debe a que continúa pintando todos los días. "No puedo dejar de pintar, tanto marinas como paisajes; bordes costeros, el litoral central y cordilleras", añade.
Su gusto por el impresionismo, tomando como referente a Claude Monet, también lo ha llevado a realizar lienzos inspirados en parajes naturales de su residencia en la provincia de San Antonio y en variadas locaciones rurales de nuestro país.
Sobre cómo es el proceso creativo de su serie de obras marinas responde que la inspiración la tiene al frente, señalando al Pacífico.
"El taller mío está acá afuera. Ese que está allá, el mar... ahí lo tengo". Afirma que dentro de su casa pinta bajo cuatro murallas, pero que parte primordial de su creación nace de las horas de apreciación que obtiene cada día al mirar el océano. "Es distinto poder salir y mirar a los buques de guerra, como los de marina mercante y veleros. Eso es lo que me permite pintar tanto".
Además afirma que se le considera el Thomas Somerscales del siglo XX y XXI. Aquel marinista inglés fue el encargado de realizar la primera pinacoteca de la Armada, además de la serie de obras sobre la Guerra del Pacífico. Por otro lado, Marcelo Folch es el realizador del 80% de las obras del segundo museo del Ejército.
Su hijo Hans añade que como antiguamente no había fotografías, el único registro para tener visualidad de los armamentos, buques y personajes, era la pintura. Su padre añade que quizás él no haya visto los combates, como el de Angamos o de Iquique, pero que las referencias que ha recibido han sido de ayuda fundamental para la creación de sus lienzos.
Aves y patrimonio
Hans Folch es diseñador gráfico de la Universidad de Valparaíso. Casa de estudios donde trabaja actualmente como asistente en la Dirección de Vinculación. Cuenta que durante sus años de estudio, estuvo constantemente ejerciendo el arte. Fue en esos años donde aprendió sobre el grabado en xilografía y que fue tanto su gusto por aquella técnica, que incluso lo llevó a enseñar sobre la misma. Le llamó la atención que mezclara distintas disciplinas, como tallar madera y llevar esa matriz al dibujo para obtener una obra de arte.
Sus grabados están enfocados en todo lo relacionado a la arquitectura patrimonial. Enfocándose en las calles de Valparaíso, las cuales le sirven de inspiración por sus diseños característicos. Da como ejemplo su obra "Asimétrico", un lienzo en técnica mixta, usando grabado y acuarela. Afirma que el año pasado recibió el comentario de que hacía cosas similares a las de Loro Coirón, destacado artista de las calles de Valparaíso. Hans Folch afirma que las obras que realiza el grabador francés se basan en contextos y situaciones, mientras que su arte está netamente enfocado en retratar la arquitectura de Valparaíso por sí misma. Por su obra "Valparaíso Psicodélico" ganó el tercer lugar en el concurso de artes visuales "Camilo Mori". Entre otro de sus logros se encuentra la serie de ilustraciones infantiles que realizó para el libro "Zapatito Roto" de la Masonería Mixta.
Pero sus más recientes trabajos tienen por inspiración las aves de Chile. Señala que sus obras se diferencian de las ilustraciones hiperrealistas que son utilizadas en las enciclopedias, ya que en ellas se pierde el sentido de las texturas que permite cada trazo de la acuarela. "Hace un par de años que comencé a pintar aves. Mi padre me cuenta que tenemos un pariente, llamado Aldo Folch, que también lo hacía". Marcelo Folch sigue la historia y dice que aquel pariente estuvo contratado por una fábrica de porcelanas alemanas, donde pintó aves en algunas de sus piezas. Es por eso que Hans afirma que pintar aquellos animales de nuestra fauna le nació casi de manera innata.