Superintendencia interviene en dramático caso de bullying
J.A.S. de 14 años permanece internado en el Hospital Van Buren. En el establecimiento, aseguran que se le prestó contención y ayuda tras fuerte episodio de violencia. Corporación de Viña anunció "amplia investigación".
Priscilla Barrera Ll. y Nicole Valverde S.
Hasta ayer en la mañana, la Superintendencia de Educación de la Región de Valparaíso no había recibido denuncia alguna relacionada con un caso de bullying ocurrido la semana pasada al interior del Colegio Enrique Cárdenas Rivera de Reñaca Alto, hecho tras el cual, el alumno de 14 años identificado como J.A.S. resultó con graves lesiones. El adolescente está con riesgo vital internado en el Hospital Carlos van Buren de Valparaíso.
Por lo mismo y tal como lo informó el superintendente regional, Pablo Mecklenburg, este estamento resolvió, apenas conocido públicamente este hecho, actuar de oficio, solicitando a primera hora los antecedentes del caso.
"Vamos a actuar de oficio porque hasta el momento de esta conversación no tenemos una denuncia formal, pero nosotros tenemos el procedimiento alternativo que cuando hay un hecho quye es de conmoción pública, nosotros actuamos de oficio y le hemos pedido a nuestro equipo de fiscalización que requiera los antecedentes al establecimiento educacional respecto de todo lo que nos pueda informar de lo que ocurrió lamentablemente con el chico", detalló Mecklenburg.
El personero recordó que la obligación de los establecimientos es siempre actuar en resguardo de los niños y niñas, de manera permanente, y activar los protocolos y si tienen que trasladar a los niños a un centro asistencial y hacerlo. "La obligación de los establecimientos es informar de una situación grave como ésta", precisó Mecklenburg.
Padres
Muy afectados con todo lo ocurrido y demandando información oficial del establecimiento, los padres del alumno de octavo básico, Claudia Salas y Jaime Arancibia, concurrieron ayer al colegio de su hijo, requiriendo documentación respecto de lo ocurrido en el incidente, y sobre el que el colegio tiene una versión diametralmente opuesta, negando que existiera una agresión tan violenta como la que describieron los padres del afectado.
La madre del adolescente manifestó que ella había sido citada al colegio el miércoles de la semana pasada porque su hijo se había trenzado a combos con otro compañero, pero que en el colegio desconocían que su hijo recibiera un golpe de patada en la cabeza, lesión que habría provocado que el adolescente se encuentre en riesgo vital.
"No nos entregaron ningún papel, ni del seguro escolar, nada. Mi hijo entró ese día caminando y me lo llevé en silla de ruedas (...) En el colegio no sabían del golpe en la cabeza, de los combos sí, pero no sabían de la patada en la cabeza a mi hijo. Tengo grabado con testigos que incluso algunos profesores sabían del golpe en la cabeza y en el colegio lo desmintieron. Nosotros vinimos a hablar con la directora porque recién comenzamos todo esto", explicaba ayer muy afectada la madre de J.A.S.
Claudia Salas aseguró recibir una llamada telefónica de un familiar del menor que había agredido a su hijo, pidiéndole disculpas y reconociendo que el adolescente le había propinado una patada en la cabeza.
"Cuando yo escuché eso caí desmayada de la impresión. Por culpa de esa patada mi hijo sufrió una hemorragia cerebral", añadió Claudia Salas quien admitió haber recibido apoyo de los apoderados del curso de su hijo.
El padre del adolescente, Jaime Arancibia precisó que su hijo permanece estable aunque aún en riesgo vital. "Está conectado a una máquina, con respirador mecánico, está con un sensor en su cabeza que mide la presión de su cerebro y mientras él no despierte seguirá con riesgo vital", detalló afectado su padre.
Claudia y Jaime manifestaron que su hijo era un estudiante tranquilo y de excelencia académica, situación que fue confirmada por el establecimiento.
VERSIÓN del colegio
Preocupados con todo lo ocurrido pero entregando una versión totalmente distinta a la proporcionada por los padres del menro, en el colegio Enrique Cárdenas detallaron de manera pormenorizada una conducta inusual del adolescente el día de los hechos y el anterior.
María Lucy Olivares, directora del colegio acompañada por inspectores, docentes y encargada de convivencia escolar, informó de lo ocurrido la semana pasada, descartando que J.A.S. sufriera una patada en su cabeza.
Según los docentes, el joven había presentado una conducta agresiva y destemplada el martes 29 de agosto, día en que se fugó en dos oportunidades del colegio. El joven fue aconsejado para que no repitiera esas conductas, reaccionando de manera agresiva.
El miércoles el alumno llegó más tarde del horario de entrada sin dar explicaciones sobre su retraso. Al ingresar a clases se sentó con los pies sobre el escritorio llamándole la atención su profesora. Fue en ese momento en que otro compañero se le acercó diciéndole algo en el oído, provocando la reacción de J.A.S. iniciándose la pelea a combos, la que, según los docentes, no habría durado más de un minuto, debiendo intervenir inspectores y otros profesores pero, según la directora, sin mayores consecuencias. A través de un comunicado la Corporación Municipal de Viña del Mar lamentó profundamente los hechos que se está realizando una amplia investigación interna para esclarecer cómo ocurrieron los hechos y establecer eventuales responsabilidades en el accionar de los protocolos correspondientes.
Hospital fricke
En relación a la denuncia efectuada por los padres del joven J.A.S, la Dirección del Hospital Dr. Gustavo Fricke del SSVQ informó que dispuso el desarrollo de una auditoría clínica para revisar el caso del paciente. Durante la atención del joven, éste recibió atención de diversos especialistas y del equipo multidisciplinario del hospital. Además, se le entregaron los cuidados requeridos en virtud de su evolución, determinándose su ingreso a la Unidad de Paciente Crítico, para efectuar el monitoreo de su evolución. Posteriormente, definió su traslado al Hospital Carlos Van Buren para su manejo. Los antecedentes de su condición clínica, evolución y diagnóstico son reservados, por la Ley de Derechos y Deberes de los pacientes.