El terremoto sigue siendo el rey indiscutido de las Fiestas Patrias
Destronando a la chicha y el vino con fruta, es por lejos el brebaje más pedido en las ramadas.
Hace ya varios años que fue lentamente conquistando a los parroquianos con su dulce sabor y su colorida imagen que encanta por igual a todos. Es el querido terremoto, situado actualmente como el trago oficial del 18 de septiembre.
Si en Navidad tomamos Cola de Mono, y en Año Nuevo, Champaña, para las Fiestas Patrias es irrenunciable disfrutar de un terremoto. Esa impensada mezcla de pipeño meciendo una roca alba de helado de piña, y decorado con un sutil toque de granadina, es la estrella de este mes.
En el parque Alejo Barrios fue el trago más solicitado, en sus diversas versiones. Con fernet, menta, un corto de pisco, o incluso la versión sin alcohol que se ofrecía a los niños (Jugo, helado y granadina).
Francisco Zapata, desde "Los Alfonsi" cuenta que mandó a pedir una gran cantidad de litros de pipeño desde San Felipe para poder responder a la demanda de terremoto.
"De San Felipe, los hermanos Ibaceta nos hacen el terremoto, allá en el Aconcagua, en la casona Santa María, súper dulce. Puede ser con granadina, lo más tradicional o con fernet que algunos les gusta más fuerte. En general, la gente prefiere con granadina, siempre se va por lo dulce. También tenemos un pipeño que es un poco más amargo, pero la gente también prefiere el más dulce. Se vende mucho más el terremoto que la chicha. Para el terremoto yo traje alrededor de 1.500 litros, y de chicha traje como 200 litros", ilustra el fondero.
Una versión ligeramente distinta, es la que ofrecía Hugo Barrera en el mismo Parque Alejo Barrio, haciendo propaganda del "Huracán", un trago de color verde, del que no quiso entregar mayores datos, pero aseguró que es altamente destructivo.
"Acá tenemos la novedad que es el huracán, es parecido. Tiene menta, eso es todo lo que te puedo decir. Somos los únicos que lo tenemos por acá, y es más poderoso que el terremoto, de todas maneras", promete.
Earthquake
En las fondas de Viña del Mar, había una que destacaba por lucir una bandera estadounidense al lado de la chilena.
Desde la mesa, Alfonso Muñoz, explica: "Acá en la fonda 'Ñuque Mapu', Somos multinacionales, nos llegó harta gente americana y gente de Francia. Lo que pasa es que acá, nosotros somos bilingües, entonces los vecinos que no hablan inglés nos echaban a la gente extranjera para acá".
En efecto, fueron varios los gringos que se pasearon por las fondas para adentrarse en la celebración patria. Según comenta Alfredo, les encantó el terremoto, o como se diría en su lengua nativa, el "earthquake", pero advierte que había que agregarle una pizca de whisky, para "agringar" el trago.
"Había harto turista gringo. Ellos no entendían nada de lo que pasaba o de lo que se celebraba acá, ahí nosotros les explicábamos que se trataba de la celebración de la Independencia de Chile, algo así como el 4 de Julio que celebran ellos. El terremoto les gustaba harto, con piquete, con un poquito de whisky. Les gustó muchísimo" , menciona el fondero viñamarino.