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Lluvia de millones espera a los jugadores del Kino

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Este domingo, el Kino sorteará uno de sus más grandes pozos acumulados: 6.300 millones de pesos a repartir entre todas las categorías. El sorteo será el segundo más abultado, después del realizado el 7 de mayo pasado, cuando fueron 6.500 millones de pesos los que tentaron a apostadores frecuentes y también esporádicos. Sin embargo, a dos días de que gire la tómbola, los locales de venta de juegos de azar de Valparaíso poco a poco comienzan a subir las ventas de los boletos.

Uno de los locales donde la fiebre por el millonario sorteo es el dirigido por Uberlinda Villalobos, en calle Cochrane. Aunque la encargada reconoce que existe un aumento en las ventas cercano al 25%, el entusiasmo de los porteños no ha dado para provocar aglomeraciones como en otras ocasiones. Quizás, los jugadores aumenten en las horas previas al sorteo, a eso apuestan en este lugar.

Mientras atiende a decenas de soñadores que buscan cambiar su vida ganando el premio mayor, Uberlinda también se da tiempo para soñar. "A veces compro boletos, quizás ahora compre (…) si ganara, no trabajaría más", comenta.

Como ella, otros porteños también sueñan con lo que harían si se quedaran con el gran pozo. Por ejemplo, Marcela González, dueña de casa que compró un boleto antes de volver a su hogar en cerro Barón, compartió uno de sus sueños: "Si ganara le daría un poco de plata a mis hijos y también haría un viaje fuera de Chile".

Rateros dejaron sin micro a niños de Laguna Verde

El vehículo robado en Playa Ancha era usado para trasladar a estudiantes hasta distintos colegios de Valparaíso.
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Mirian Mondaca Herrera. - La Estrella de Valparaíso.

Un pésimo amanecer tuvo el porteño Ricardo San Martín el martes 3 de octubre, cuando llegó a buscar su microbús a avenida El Parque en Playa Ancha, y simplemente no lo encontró. En un lapso de no más de dos horas, su herramienta de trabajo se esfumó y , de paso, dejó a más de 30 alumnos de enseñanza media y básica del sector Laguna Verde sin transporte.

San Martín comenta que todo ocurrió entre las 07.30 y las 09.30 horas, a plena luz del día, por eso el desconcierto es mayor. El hombre precisamente dejaba su herramienta de trabajo en ese lugar confiado en que no habría problemas, ya que se trata de un lugar muy concurrido y donde incluso hay cámaras de seguridad. "Estaba en toda la esquina, en El Parque con la subida El Membrillo (...) es un lugar muy transitado, de muchos vehículos y personas, donde no debería ocurrir ese tipo de cosa. Nunca pensé que me podía pasar esto", señala el propietario del vehículo.

Intensa búsqueda

En los cuatro días que han pasado desde la última vez que vio el microbús, este porteño ha recorrido cuanta quebrada o sitio eriazo que le han aconsejado, pero no hay rastros de la máquina. Es como se la hubiese tragado la tierra. Él ya hizo la denuncia en la Primera Comisaría de Carabineros de Playa Ancha, pero hasta ahora no hay resultados positivos.

A medida que pasan los días, el sentido común dice que es más difícil encontrar el vehículo, pero el conductor no pierde la esperanza, por lo que asegura seguirá con su búsqueda y estará atento a cualquier pista que aparezca. "Aunque solucioné el problema del traslado de los niños por el momento, quiero encontrar el bus, porque es una pérdida económica grande para mí también. Vale casi 19 millones de pesos", se lamenta.

Solución pasajera

El microbús robado tiene capacidad de 31 asientos, y según detalla el afectado, está licitado al Ministerio de Transportes. Tenía las condiciones óptimas para el traslado de los estudiantes, lo que no ocurre con el vehículo que está usando de forma momentánea, ya que "es más incómodo y chico", dice.

El problema espera zanjarlo durante los próximos días, ya que debe tener una solución definitiva para que los alumnos puedan seguir recibiendo el servicio. Por eso, encontrar el vehículo sería una bendición. Alumnos de varios establecimientos educacional de Valparaíso han sido afectados por el robo. Entre ellos, el Liceo Eduardo de La Barra y la Escuela Industrial.