Claudia Carvajal R.

Aprimera hora de ayer se realizó una reunión extraordinaria del directorio de la Corporación que administra el Museo Baburizza, presidido por el alcalde Jorge Sharp, para evaluar los pasos a seguir luego del embargo de tres valiosas obras de Thomas Somerscales y Mauricio Rugendas y que podrían ser retiradas del palacio, si la municipalidad no paga hoy la deuda con los ex funcionarios despedidos.

El director del Museo de Bellas Artes porteño, Rafael Torres, se refirió a la compleja situación que amenaza los valiosos cuadros y despejó algunas dudas sobre los últimos acontecimientos.

"El alcalde Jorge Sharp citó a reunión al directorio para informarle de la situación, estuvo acompañado por su equipo jurídico, quienes hicieron una exposición principalmente para darle tranquilidad al directorio debido a que las obras no saldrán del museo. Está la absoluta convicción de la importancia de las colecciones, de su valor patrimonial, lo invaluable que resultan y lo importante que son para la ciudad", destacó Torres.

-Es posible que el embargo marque un precedente y otro acreedor de la municipalidad quiera embargar obras del museo, ¿analizaron la manera de resguardarlas para que no vuelva a ocurrir?

-Por complejo que resulte, establece un precedente y por eso el equipo jurídico de la municipalidad, -propietaria de las colecciones del museo- está analizando todas las opciones para que esto no se vuelva a repetir, independiente de las problemáticas coyunturales que pueda tener el municipio de Valparaíso.

-¿Una de las posibilidades es traspasar la colección a la Corporación Museo Baburizza?

-Aún no hay una decisión al respecto; jurídico quedó en analizar y se comprometieron a entregar al directorio un informe con las mejores vías. Aquí lo que se ha puesto de manifiesto es la importancia de salvaguardar las obras a todo evento.

Congreso

-En algún momento estas obras estuvieron en comodato en el Congreso ¿podría ser esa una fórmula?

-Hay que recordar que las obras de la colección del Museo Baburizza estuvieron en el Senado en comodato cuando el palacio estaba cerrado por su estado de deterioro. Hoy no hay ninguna razón para que las obras vayan a otro lugar en estas condiciones. El lugar de exhibición de las obras es el museo en el Palacio Baburizza.

-¿Esta situación le provoca algún daño al museo, a su prestigio internacional?

-Sería poco ajustado a la realidad decir que lo afecta, pero es una situación que tiene un origen jurídico. Ciertamente hay una señal de incertidumbre que justamente estamos tratando de desechar. Pero las obras están en el museo, no van a salir. El alcalde y el municipio han comprometido todos sus esfuerzos para que esto no ocurra. El directorio de la Corporación ha decidido apoyar las gestiones. Nuestro trabajo, actividades y generación de audiencias; nuestro aporte al quehacer cultural de la ciudad y del país no está en tela de juicio.

-¿Es efectivo que ya han llamado de museos internacionales para preguntar por el remate de las obras?

-No, no tengo ninguna información de ese tipo. Ha habido preocupación sí. He recibido llamados de entidades culturales y museográficas y han sido principalmente de apoyo, de solidaridad; para preguntar cómo pueden ayudar. En general, la comunidad cultural ha entendido que esta es una situación puntual y como nosotros, también tienen la confianza de que va a pasar muy pronto. El museo Baburizza tiene un emplazamiento tan maravilloso e importante para la ciudad y una gestión sólida y permanente que va a ayudar a que esto no sea más que un recuerdo.