Nicole Valverde S.
Remontémonos al mes de abril, específicamente, entre los días 22 y el 24 de abril de este año. ¿Se acuerda de los temblores que nos dejaron con los nervios de punta por aquellos días? Pues bien, resulta que expertos del Centro Sismológico Nacional (CSN), de la Universidad de Chile, descubrieron que durante esas jornadas de abril en la Región de Valparaíso se percibió una secuencia de movimientos sísmicos que finalizó con un terremoto magnitud 6.9. Un inusual fenómeno de la naturaleza al que llamaron "terremoto lento".
Juan Carlos Báez, geodesta del CSN y uno de los co-investigadores del estudio, asegura que "en un periodo de cuatro años, nosotros hemos visto solamente dos terremotos lentos: en Pisagua y éste de Valparaíso. En los otros terremotos que hemos tenido, por ejemplo, en Illapel y Melinka, no hemos visto esto".
Sismos lentos
Gracias a los datos GNSS (Sistema Global de Navegación Satelital, que incluye el sistema GPS) recopilados por el CSN, los investigadores pudieron observar que esta sismicidad estuvo asociada a un movimiento lento de las placas que aceleró en su fase final, cuando sucedió el terremoto principal, que se produjo la tarde del lunes 24 de abril.
El investigador principal del estudio, Sergio Ruiz, explica que en varios terremotos se ha observado que la fase de nucleación previa a ellos está asociada a estos movimientos lentos.
"Entonces, si uno lograra entender el proceso que está involucrado en estas señales, se podría tener luces sobre cuáles son las causas que gatillan estos terremotos de gran magnitud. En la mayoría de los terremotos en Chile existe una sismicidad precursora. Lo que nosotros tratamos de entender es si existe un fenómeno físico que controla eso", precisa.
Entender el fenómeno
Los investigadores comprobaron que en Valparaíso hubo un "terremoto lento" gracias a la mejor calidad de instrumentación con que cuenta hoy el país. Y a la vez, proyectaron que si ese comportamiento de placas se repitiera en todos los sismos, en el futuro se podría generar un modelo físico que permitiría entender qué es lo que gatilla los terremotos.
"Esta secuencia fue caracterizada por una fase de nucleación o precursora que correspondió a un movimiento lento que duró entre tres y cuatro días, acompañado de un enjambre sísmico, y posteriormente se produjo el terremoto que rompió un área de unos 10 kilómetros de radio", afirma el académico Sergio Ruiz.
Fase de nucleación
La secuencia de Valparaíso fue registrada por el CSN a través de los instrumentos de la red sismológica y geodésica (GNSS).
La actividad precursora comenzó el 22 de abril de 2017 a las 22.46 horas, cuando ocurrió el primer sismo de magnitud 4.8. Otro terremoto de magnitud moderada se produjo el 23 de abril, a las 02.36 horas (magnitud 5.9). El evento principal tuvo lugar el 24 de abril, con una magnitud 6.9 en la escala Richter.
Aquí la placa de Nazca se desplazó y enfrentó por debajo a la Sudamericana. Y según los expertos, lo poco común del sismo lento de Valparaíso fue que, a pesar de que se produjo desplazamiento de placas, no liberó una gran cantidad de energía, pero fue percibido por la gente en un fenómeno que continuó con réplicas que duraron más de una semana. ¿Se acuerda?
Remezón más fuerte
Juan Carlos Báez, geodesta del CSN, recordó que la placa Nazca se mueve a una velocidad media de 7 cm/año en dirección Este, lo que genera una compresión en la placa Sudamericana, la cual se contrae en el periodo inter-sísmico (entre terremotos) durante décadas.
"Esta presión es liberada de forma inversa en algunos segundos durante el terremoto. Ahora bien, en el caso de un sismo lento, estos desplazamientos inversos se producen en días, en este caso, acompañados por poca actividad sísmica, o generalmente de menor magnitud. Lo que hemos observado es que el desplazamiento lento culmina generalmente con un evento mayor, en este caso el sismo 6.9 Mw", agrega Báez, quien confirma que de no haberse producido el fenómeno previo del "terremoto lento", el terremoto del 24 de abril podría haber superado los 7.1 Mw.
"Si no hubiéramos tenido este terromoto lento, y sólo hubiese ocurrido el desplazamiento total de las placas con un terremoto solamente, éste habría sido de mayor magnitud, considerablemente más fuerte", advierte Báez.
Cabe recordar que para el terremoto 6.9, la Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior y Seguridad Pública de Valparaíso decretó la evacuación preventiva de toda la ciudadanía hacia los sectores altos de las zonas costeras, la que se desarrolló con total calma en la ciudad Puerto. Una señal de que estamos mejor preparados ante los remezones de la tierra... sean lentos o rápidos.