En una toalla tiran un feto a la basura
Sucedió en Sotomayor con Errázuriz. Era un varón, de no más de 5 meses, envuelto en placenta y con el cordón.
Sebastián Mejías Oyaneder - La Estrella de Valparaíso
Josefina Vidal cumplía con su deber como recolectora de basura, entre Sotomayor y la Aduana, en Valparaíso, cuando una bolsa un poco más ligera de lo normal, tirada en un basurero ("Arturito") que hay justo en la esquina de Plaza Sotomayor con Errázuriz, le hizo pensar que estaba ante un hallazgo de ropa. No lo pensó e, inmediatamente, la tiró en su tacho de basura. Fue ayer a las 12.00 del mediodía.
Un rato más tarde, cuando la estaba abriendo, pensando en lavarla y darle un uso, se encontró con un par de toallas, en cuyo interior se cobijaba un feto, con rastros de placenta y el cordón umbilical recién cortado.
"Estas cosas difícilmente se olvidan. Este feto me seguirá por el resto de la vida", contaba esta trabajadora del aseo, quien en catorce años de oficio, nuca se había encontrado con algo similar. Tampoco sus compañeros de pega que, diariamente, recorren las calles de Valparaíso.
De pura intuición no más, y enseñando con sus manos, Josefina Vidal muestra el tamaño del hombrecito hallado, de no más de quince centímetros, afirmando que, lo más probable, su madre no alcanzó a llegar a los cinco meses de embarazo
Roberto González, subcomisario de la Brigada de Homicidios, confirmó la idea de esta trabajadora. Luego de algunos análisis, realizados por un médico criminalista, se llegó a la conclusión de que el feto no tiene más de 24 semanas.
Asegura González que, desde ya, se está trabajando por recuperar las cámaras de seguridad que rodean el sector, ya sea en la Aduana o la Sudamericana de Vapores, o los edificios que dispongan de ese material clave. Aunque recién el martes, se iniciarían los trabajos para analizar las cintas.
También recurrieron a los distintos centros asistenciales, para comprobar algún caso de una madre con signos de haber abortado. Pero no consiguieron nada.
Ahora la mujer que halló el feto, Josefina Vidal, espera poder recuperase algún día de lo vivido. Piensa en lo que hay detrás de este aborto y se imagina una madre, que para ella no es más que una "yegua", dice, que le hizo pasar el susto de su vida.