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El ritmo del K-Pop se toma los espejos y vitrinas de Viña

Grupos de jóvenes ensayan sus coreografías tratando de imitar a sus ídolos asiáticos. Esta tendencia musical llegó a Chile hace más de diez años y hoy sigue pegando fuerte.
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Isabella Gálvez Olivo - La Estrella de Valparaíso.

Muchos hemos sido testigos de los jóvenes que, día y noche, se paran en las plazas y ensayan coreografías frente a paredes altas de vidrio pertenecientes a bancos o tiendas en el centro viñamarino. Muchos tienen teñido el pelo de verde menta o naranja brillante; otros bailan con faldas cortas y zapatillas de marca Converse de colores. Pero, ¿qué es lo que hacen exactamente y qué ritmo es el que escuchan para acoplar sus pasos? Estos grupos de baile e imitadores se dedican al K-Pop, género musical asiático que desde hace más de 10 años mueve masas en el país y todo el mundo.

Nacido en Asia

El K-Pop o pop coreano es un género musical nacido en Corea del Sur e influenciado por el Rock and Roll y Big Band occidental. En la década de los '90 apareció con fuerza en su país de origen y presentó un mundo nuevo y único para jóvenes fanáticos del pop y el baile.

El primer grupo en debutar esta nuevo estilo híbrido fue Tai-ji & Boys en 1992, agrupación que incorporó a su música elementos del rap, rock y tecno. A partir de esta primera impresión de fragmentos musicales llegados de Estados Unidos, aparecieron los dúos de hip hop, las girlbands, boybands y las agencias de entretenimiento.

El K-Pop nació para divertir a los más jóvenes, pero en la actualidad desde pequeños hasta adultos disfrutan de su ritmo. Se caracteriza por ser una tendencia flexible y variada, permitiéndole a los artistas crear su propia temática y personalidad que responde a las diferentes necesidades del público.

Sus conceptos se expresan mediante su color de pelo, su vestuario, sus accesorios, sus gestos, su maquillaje y la puesta en escena de sus presentaciones en vivo. Así es como, por un lado, hay agrupaciones con coreografías tiernas y suaves y, por otro, hay quienes apelan a la sensualidad o rudeza.

¿Y en Chile?

A partir del 2006 , las coreografías y vídeos musicales llegaron a los chilenos gracias al canal infantil ETC, que también transmitía series de animé y los conocidos dramas coreanos.

Grupos como Super Junior y Girls Generation despertaron el interés de los locales que se dedicaron profundamente a conseguir la música de sus ídolos e imitar a la perfección los números.

Desde entonces, el pop coreano se tomó Chile. La viñamarina Danae García, por ejemplo, es una joven de 22 años que se dedica desde el 2010 a copiar las coreografías de famosos grupos femeninos como 9Muses y TWICE. Cuenta que siempre le ha gustado bailar pero se enamoró de este género cuando, junto a un amigo, vieron a una agrupación de chicos hacer un cover de una famosa canción de Super Junior en la Quinta Vergara. "Lo que más me gusta es la coreo, porque todo se expresa bailando y cantando. Interpretar a un personaje y actuar como si fuera ella, famosa y reconocida es lo que más disfruto de esto", dijo la joven.

En el pasado ha concursado en competencias de K-Pop, planificada por organizaciones y productoras que buscan jóvenes talentos. Los premios puede ser desde dinero para lo integrantes de la agrupación, hasta el financiamiento de un vídeo musical. Danae es parte de esas personas, que de 15.00 a 20.00 horas, se paran en la plaza María Luisa Bombal de calle Villanelo o en Arlegui, a practicar sus coreografías y usar los vidrios de la calle como espejos.

Dedicarse a esto no solo implica agotamiento físico, también inversión monetaria. "Mandamos a hacer los trajes de baile. Cada uno sale al rededor de $18 mil pesos. Si el evento es en Santiago, se suma los pasajes, más lo que gastamos en maquillaje y peinado", comentó la bailarina. Esto demuestra el gran impacto que ha tenido el pop asiático en Chile.

Army en la región

Uno de los fandoms (grupo de fanáticos) más grandes y organizados en la zona es el del grupo BTS, banda de siete miembros que ha roto récords mundiales con la venta de su álbum "Love Yourself: Her", y que se consagró como el primer grupo k-pop en presentarse en una premiación norteamericana, los American Music Awards 2017.

La fanaticada de BTS, llamada ARMY y liderada por Isabel Del Río y Yesenia Astudillo, cuenta con más de 60 mil seguidores en twitter y una lista larga de eventos. "Esto pasó de ser un hobby a un trabajo no remunerado", contaron sus cabecillas durante una reunión en la Plaza Vergara de Viña del Mar, donde se juntaron más de 50 ARMYs a escuchar canciones y comprar posters.

"El año pasado, por ejemplo, organizamos el cuarto aniversario de la banda. Pero... fue más complicado que una simple junta. Arrendamos un teatro, contratamos seguridad, animadores, luces y stands de comida. Fue masivo y nos tuvimos que hacer responsables de la seguridad de los asistentes", añadieron. Se dedican profundamente a sus ídolos, planificando instancias como la proyección de conciertos o colectas de dinero para enviarles a los cantantes, hasta Corea, regalos en sus cumpleaños.