Belén Petit Saa - La Estrella de Valparaíso

La danza butoh es un lenguaje escénico vanguardista creado por Tatsumi Hijikata a finales de 1959, nacido bajo los conflictos que ocurrieron en 1945 en plena II Guerra Mundial con los ataques de bombas nucleares en Hiroshima y Nagasaki.

Hans Martinez, es intérprete y estará facilitando un taller de Danza Butoh en Valparaíso. Él explica que dicha expresión "cumple con desarrollar un lenguaje único de cada cuerpo, descubriendo así las memorias que guarda nuestra anatomía. Se viajará por las diferentes imágenes poéticas que se danzarán y encontrarán nuevas calidades y cualidades de movimiento"

El bailarín cuenta que esta técnica se diferencia de las danzas occidentales tradicionales, como el ballet clásico porque "esas se basan en movimientos decididos por el bailarín, mientras que en el butoh se busca un silencio interno y ser movido a través del impulso y de las imágenes que tenemos en el subconsciente".

Agrega que "cuando la gente se expone a un cuadro de una obra de danza butoh, no se encuentra con algo bonito, con algo estético como la danza contemporánea, se encuentra con algo que está en un quiebre, en conflicto constante. De hecho, a la gente igual le impacta, pero es porque lo que se está exponiendo son imágenes que el intérprete tiene en su subconsciente y eso hace que se vea extraño, pero hay gente que al entenderlo ha llegado a llorar".

Talleres de butoh

Este taller es una forma de iniciarse en el butoh y los contenidos que este aborda son consciencia corporal, respiración y movimiento, manejo de energía e improvisación y creación literaria.

Martinez detalla que "lo primero que vamos a ver es lo de la consciencia corporal. La gente va a poder conocer la anatomía humana, vamos a hacer ejercicios de yoga y de pilates. Luego de eso va a estar el contenido del vacío, el trabajo con la respiración, va a haber mucho contacto con el otro y cómo me puedo desarrollar con elementos que me rodean, como el piso o la muralla".

Agrega que "también vamos a trabajar mucho el uso de las imágenes visuales y cómo un cuerpo puede transformarse a partir de un objeto o de una imagen".

Otro punto que agrega Martínez es el de la poesía en el cual también se inspira el butoh "vamos a ver la poesía, porque cuando lees una te entrega muchas imágenes y sensaciones y con eso se trabaja una traducción experimental con el texto. La gente podrá crear un texto a partir del poema de Gabriela Mistral que se llama "Vergüenza" y a través de ese concepto, cada uno va a trabajar desde su vergüenza y cómo danzarla.

Y como cierre, cuenta que se realizará una muestra sobre lo experimentado en el taller y el viaje personal de cada uno.

A fines del siglo XIX en Austria se fundó un movimiento artístico rupturista denominado "La Secesión". Propugnaban un nuevo arte desvinculado del clasismo y del romanticismo. Sus fundadores fueron los pintores Gustav Klim, Egon Schiele, Kolomar Moser y Otto Wagner. Pronto atrajeron a arquitectos y decoradores. Entre ellos Arnaldo Barison y Renato Schiavon. Ese movimiento dio vida al Art Nouveau, al estilo Liberty y posteriormente al modernismo. Este año Viena conmemora el centenario de la muerte (1918) de los cuatro pintores que dieron vida a la Secesión.

¿Qué tiene que ver la Secesión con Valparaíso? Pues Barizon y Schiavon construyeron el palacio Baburizza, la Biblioteca Severín y remodelaron el Palacio Rivera ubicado en la decaída calle Serrano 543. Palacio de la época de opulencia comercial y naviera de esa calle y del puerto. Edificación prácticamente en ruinas y en eminente peligro de daños mayores. Entre los hermosos decorados, puertas talladas, vitrales, escalas de ónix y figuras escultóricas los arquitectos pintaron muros y cielos.

Rompiendo con la corriente historicista de su fachada, en los frescos hay elementos florales, decoraciones alegres, escenas de la naturaleza, paisajes y retratos de mujeres de la época del Art Deco y del Liberty. Gratos motivos que alegraban sus interiores y que hoy nos hablan de un pasado esplendoroso. Fue remodelado después del terremoto del ´6 cuando Barizon y Schiavon trajeron el modernismo a Valparaíso y nuevos aires estéticos a las mansiones de la ciudad.

Este año en que se conmemora el centenario del fallecimiento de esos cuatro pintores austriacos vale la pena recordar que los ecos de la Secesión llegaron a Valparaíso como signos de una modernidad en un período de gran auge y esos frescos son quizás los únicos símbolos de una expresión artística que alcanzó este lejano lugar del mundo. También hay que recordar el espíritu visionario y progresista del senador Guillermo Rivera Cotapos entonces propietario del palacio que lleva su nombre.

"Vale la pena recordar que los ecos de la Secesión llegaron a Valparaíso como signos de una modernidad en un período de gran auge"."