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Damnificados ya tienen casa propia

Proyecto "San Benito y Santa Ana" acogerá a afectados por incendio del 2014 y beneficiados por subsidio.
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Belén Petit Saa - La Estrella de Valparaíso

Ansiosos, emocionados pero sobre todo felices se encontraban las más de 300 familias por la entrega de sus viviendas definitvas, recibiendo las llaves de sus departamentos en la población Juan Pablo Segundo, en Rodelillo.

Rosa Collao, una de las beneficiarias por subsidio habitacional, no pudo aguantar las lágrimas al ingresar a su nuevo hogar "estoy feliz porque he esperado muchos años y este es un sueño hecho realidad".

Agregó que "este momento va a ser inolvidable. Estoy super agradecida de Dios, de mi familia, de mis hijos y de mi esposo, todos siempre apoyándonos".

Y no fue la única Collao que llegó a vivir al mega proyecto inmobiliario que lleva por nombre "San Benito y Santa Ana", porque también llegó su hermano Alfredo Collao y su madre, Georgina González.

Alfredo Collao, también fue beneficiado por subsidio y no podía contener la feliciddad de cumplir el sueño de la casa propia "es indescriptible deinir lo que uno siente cuando entra, pero igual es emocionante porque es un logro importante (...) Yo creo que nosotros llevábamos unos 6 o 7 años en el proceso y valió la pena".

La progenitora de ambos, Georgina, cuenta que "por fin puedo dejar de pagar arriendo, que si no hubiese pagado tantos años, ya sería millonaria", cuenta entre risas.

Agrega que "aquí voy a vivir con una abuelita que cuido porque cuido enfermos. Y dos de mis hijos se vienen para acá así que estaremos juntos pero no amontonados".

Proyecto habitacional

Cada uno de los 315 departamentos, consideran 3 dormitorios, cocina, baño, living-comedor y logia; además, el megaproyecto habitacional incluye áreas verdes y 2 sedes sociales de cada una.

El director provincial del Servicio de Vivienda y Urbanización (SERVIU), Carlos Contador, se mostró " particularmente contento por 160 a familias que provienen del incendio de 2014, que estaban encalidad de allegados o arrendatarios, y hoy día obtienen su vivienda definitiva. La alegría que han mostrado estas familias se puede reducir a una frase mencionada por uno de sus dirigentes: hoy gano más de lo que perdí aquel día del incendio.