Iniciativa de santiaguina busca liberar a Valpo de sucias colillas
De forma cacera creó 25 ceniceros que van desde calle Esmeralda hasta plaza Aníbal Pinto.
Isabella Gálvez Olivo - La Estrella de Valparaíso
Si ha recorrido la calle Esmeralda de Valparaíso, ha sido testigo de la iniciativa ecológica que implementó Marianela Fernández hace un mes y medio.
Con latas de comida en conserva y fotocopias a color, esta santiaguina que vive y trabaja hace años en la Ciudad Puerto, colocó en gran parte de la vía, vasitos para que los fumadores pongan su colilla en ella y no ensucien más la solera.
"Mi Valparaíso"
Marianela trabaja en el pequeño local de souvenirs y recuerdos Toko Baru, en Esmeralda. Cuenta que la idea inició por la suciedad que rodea su puesto y su hogar, que se encuentra calles más arriba.
"Llevo cuatro años aquí trabajando y siempre estoy barriendo la vereda. Siempre limpio más de lo que me corresponde por un tema de higiene y por el deseo de ver a Valpo más limpio. Me estaba dando cuenta que hay muchos restaurantes y oficinas con personas que fuman demasiado y salen a botar las colillas, prendidas o apagadas en el suelo", contó la santiaguina, añadiendo que "estaba aburrida de barrer tantas colillas. Entonces pensé que debía hacer algo porque casi no hay basureros cerca o se lo han robado".
Así es como llegó a la idea de confeccionar pequeños ceniceros, con el logo de su tienda impreso y un pequeño mensaje concientizador que le abra los ojos, no sólo a los fumadores, también a toda la población porteña.
Los envases están sujetos con un alambre especial a los postes eléctricos de la calle Esmeralda. Fernández les hizo un pequeño orificio en la parte de abajo para evitar que se llenen de agua cuando llueva. Todas las mañanas, cuando camina desde su casa al local, los vacía y limpia.
Futuro
Marianela espera que su iniciativa concientice a los porteños de la basura que esconde las lindas calles de Valparaíso.
Desea reunir más latitas para llenar los postes de todo el Puerto con sus ceniceros, mayormente en las plazas y pubs donde jóvenes carreteros llenan el pavimentos de colillas.