Matías Valenzuela
Esta medianoche se transmitirá la decisiva batalla entre Gokú y Jiren, los finalistas del Torneo de la Fuerza, combate determinante para el futuro del Universo 7... nuestro universo.
"Dragon Ball", la animación japonesa que se hizo de culto en Chile hace más de una década, retomó las aventuras de Gokú y sus amigos hace poco más de un año con un nuevo ciclo protagonizado por los saiyajines favoritos de la Tierra. Esta nueva temporada vivirá un punto cúlmine con la emisión del capítulo 129, que se estrenará esta noche.
En este episodio, el penúltimo de la saga, tendrá lugar la anticipada lucha entre el protagonista Gokú, y el rival más fuerte que haya enfrentado hasta la fecha, el silencioso Jiren. Esta confrontación se ha ido tanteando hace varios meses en la serie, siguiendo el Torneo de la Fuerza, certamen que enfrenta a los mejores peleadores de cada universo (el nuestro es el 7) para evitar la aniquilación total de su mundo.
Tanto ha sido el fervor que la saga ha despertado en sus fanáticos, que se han gestado varias peticiones masivas para que los dos episodios finales sean proyectados en pantallas gigantes, posibilidad que han ofrecido algunos municipios de Chile y el mundo.
Para poder ver el capítulo junto a más fanáticos, existe el local "Game Cover" (avenida Valparaíso 1167, Villa Alemana), que ha transmitido el animé desde hace ya varios meses.
"Es mucha la gente que se junta por el capítulo, ponemos el capítulo en un proyector en la terraza, y además lo transmitimos por la misma caja en los televisores que tenemos", cuenta Marco Martínez, dueño del local.
El público es transversal, se divide en los seguidores que crecieron viendo las peleas contra Freezer, y las nuevas generaciones que conocieron a Gokú hace un par de años.
"Vienen grandes y chicos, hay muchos papás que llegan con sus hijos, pero la mayoría es público adulto que sigue 'Dragon Ball' desde las primeras temporadas. Están siempre gritando, pendientes del capítulo, si algo se mueve en la pantalla, todos gritan es como si estuvieran viendo un partido de fútbol", explica Marco, agregando que están preparando una contingencia adicional de cara a estas dos jornadas.
"Tenemos más garzones para la terraza y más mesas. De hecho, hay gente que va a puro ver el capítulo, lo esperan hasta que se transmite, y se van al poco rato", cuenta.
Un episodio histórico
Tanto es el fanatismo por los Guerreros Z en Valparaíso, que en un parpadeo se agotaron todas las entradas del concierto sinfónico de "Dragon Ball" programado para abril en el Teatro Municipal.
Su organizador, Pablo Oyarzún, que obviamente es un acérrimo seguidor de la serie, define este hito como "el final de una telenovela como las que ven las mamás, pero para jóvenes".
Sobre una posible proyección masiva, cuenta que hizo las averiguaciones, pero por razones legales era imposible.
"A mí me hubiera gustado poner una pantalla gigante en plena plaza Victoria, pero lamentablemente Toei Animation (la cadena oficial) emitió una declaración pública diciendo que podíamos ser multados. Una pena porque yo quería organizar algo más masivo", se lamenta.