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Cuando Don Elías

El mejor jugador de la historia hacía ese trayecto desde Villa Alemana a La Calera para entrenar en el equipo donde comenzó.
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Claudio Morales Salinas - La Estrella de Valparaíso

Invitado al programa NET de la cadena Fox hace unos días, el humorista Álvaro Salas sacó a relucir su calidad de hincha caturro para aclarar que Elías Figueroa "comenzó en Wanderers, no en Unión La Calera como muchos creen". Y es que en las fotografías en que el zaguero central se ve más joven, suele aparecer con la camiseta del conjunto calerano.

Pero los futboleros de la zona tienen clara la historia, aunque nunca está demás que el propio protagonista la cuente. "Yo llegué a Wanderers a los 15 años, me probé en la primera infantil, hice un entrenamiento y a la semana me dijeron, ven a entrenar con los juveniles; y a la otra semana me pidieron que fuera a entrenar con el primer equipo. Ahí me quedé y cuando tenía 17 me prestaron a Unión La Calera", cuenta el exjugador sobre los inicios de una carrera en que sus innegables condiciones le permitieron escalar muy rápido.

Y a esa temprana edad, Elías sabía que solo tenía que jugar y jugar. Por eso ese préstamo se lo tomó de la mejor manera. "Yo quería jugar en Primera, en Wanderers estaba Raúl (Sánchez, un tremendo central de esos años) y el préstamo a La Calera me sirvió, porque pude saltar de la selección juvenil a la adulta", recuerda sobre ese año 1964 quien después brillaría como el mejor de América.

Es que Elías Figueroa tenía un talento tan rotundo para jugar al fútbol desde la zona defensiva, que nunca estuvo mucho tiempo en un lugar, siempre reclamaban su presencia desde equipos más grandes, Por eso, ya consolidado como jugador de Primera, Elías volvió al Puerto -"yo era wanderino de niño chico"- y solo pasó un año antes de que cruzara las fronteras para vestir la aurinegra de Peñarol y comenzar el mito.

Nace "don elías"

Pero mucho antes de vestir de rojo en Porto Alegre con el Inter, con ese mismo color de casaca Elías recogió experiencia deportiva y de vida en su paso por Unión La Calera. Ya está dicho que nunca esperaba casi nada para dar un nuevo e importante paso desde que era un mozalbete. Y el tres veces mundialista (no fue a cinco mundiales solo porque Chile no clasificó en 1970 y en 1978) tuvo de entrada un apretón para demostrar de qué estaba hecho.

"Por Calera debuté contra Colo Colo en el Nacional... poquito no? Jeje. Lo recuerdo como si fuera ayer, porque jugué muy bien, me destacaron mucho los diarios", evoca el exzaguero, quien del coliseo ñuñoíno saldría rebautizado. "Ahí fue que me pusieron Don Elías. Hernán Solís, un famoso relator de la época, dijo, estamos ante un gran jugador, un don jugador... Don Elías, comentó; y de ahí siguió Don Elías y no paró más", sentencia.

Figueroa es un habitante del mundo twitter, y el jueves ese hito de hace 54 años en su carrera, fue recordado por la cuenta @PaseDeGooooool. Elías, perdón, Don Elías, recogió el guante y desde su nick @FigueroaChile escribió "Recuerdo como si fuera hoy, estaba nervioso pero confiante, al frente Colo Colo! Pero nosotros teníamos lo nuestro, durante el partido sentí potencia en mis piernas, que las cosas me salían fácil y que no era menos que nadie, ganamos 2 a 1 en el Nacional y fui muy feliz @ulcsadpoficial

Para La Estrella, el novel central de esos años, reconoce que "enfrentar a un equipo grande era lo que yo quería, es que yo era medio agrandado cuando cabro, y decía, si este es bueno, yo también lo soy, y quería demostrarlo. Por eso le agradezco a Unión La Calera que me dio la oportunidad, al (Salvador) Tano Biondi que era el técnico".

CON DINERO O SIN dinero

Pero en la ciudad del cemento, el joven Elías también atesora recuerdos fuera de la cancha, como el haber compartido con la dinastía Chahuán, Nicolás (sí, el del estadio), Sabino y un joven Arturo, que en esa época manejaban el club calerano con puro cariño. "Entrenábamos por las mañanas y a veces terminábamos como la una. Ahí ellos me decían, que te vas a ir así, quédate a almorzar. Fueron muy cariñosos conmigo", reconoce Don Elías, de seguro recordando las hojas de parra y otras delicias de la cocina árabe que degustaba gracias a la generosidad de los "palestinos".

Otro cosa era llegar a La Calera, en tiempos en que el tren reinaba para conectar a las comunas de la zona. Manejar un vehículo era un lujo que el mozalbetete Elías aún no se podía dar. "No tenía plata y estaba recién casado, así que viajaba en tren todos los días desde Villa Alemana. A veces no tenía plata para comprar un boleto, y me iba pasando de vagón en vagón para esconderme del inspector", confidencia.

Con esa habilidad para gambetear el cobro del pasaje llegó a ser el mejor futbolista chileno de todos los tiempos.


viajaba en tren