Nicolás Arancibia Bórquez

El mal momento deportivo que vive Santiago Wanderers se ha contagiado incluso en los jugadores, que al menos en el papel, deberían marcar la diferencia en el fútbol de ascenso. Así es el caso de Ezequiel Luna, quien tras su paso por Palestino nunca volvió a ser el mismo central que brillara con la camiseta verde, y hoy mismo, según él mismo ha explicado, se encuentra lejos de su nivel.

Consultado sobre el presente wanderino, el zaguero trasandino no ocultó en confesar que "es triste, mucho. A veces uno no encuentra explicaciones de por qué nos ha tocado vivir un año deportivo tan bajo, tan malo, en el sentido que la única alegría había sido salir campeón de la Copa Chile y no pudimos cumplir el objetivo de quedarnos en Primera División. Hoy nos toca vivir otra realidad que es ser el último en la segunda división, entonces cuando uno toca fondo de esta manera se cuestiona un montón de cosas. Nosotros reconocemos que hemos tenido errores, tanto de forma individual como equipo, y hasta el día de hoy no fuimos capaces de sacar a flote este equipo que se estaba hundiendo".

El "Misionero", sin embargo, no dramatizó demasiado respecto al último lugar que hoy ostentan los caturros, ya que "igual quedan muchas fechas por delante, en las cuales debemos empezar a ganar como sea, jugando bien, jugando mal, pero este equipo tiene que volver a encontrar esa identidad que creo yo se perdió y nos ha hecho vulnerables en otras ocasiones. Duele estar en esta situación, pero qué vamos a hacer, no nos vamos a quedar llorando en el piso como niños, hay que levantarse y luchar".

No se arrepiente

Ezequiel Luna fue parte de una camada de jugadores que, una vez consumado el descenso, decidió quedarse en Valparaíso incluso bajando su salario. Pese a la mala campaña que está realizando junto a sus compañeros, el "19" verde aseguró respecto a la mencionada decisión que "no me arrepiento para nada. Me ha tocado vivir cosas extraordinarias en este club y uno le va tomando cariño, por eso decidí quedarme, entendiendo además que fui responsable de lo que sucedió, de haber bajado de categoría. No me arrepiento, me siento cada día con mucha más fuerza de sacar esto adelante. Tranquilamente tendría posibilidades de irme a otro equipo, ahora mismo me han llamado pero mi cabeza está puesta acá en Wanderers, no me interesa irme, no me interesa que me digan que tengo 31 años y en un par de años voy a tener que dejar el fútbol, no me interesa. Hoy yo vivo mi vida acá en Wanderers y mi único objetivo es tratar de siempre hacer lo mejor para esta institución".

Cobresal

Este domingo, a partir de las 15.30 horas, el Decano tendrá la difícil misión de enfrentarse a Cobresal en el estadio El Cobre del Salvador, escenario donde el cuadro minero ha ganado todos sus partidos del campeonato, lo que hoy les permite ser los líderes de la categoría. En relación al mencionado compromiso, el defensor caturro adelantó que "Cobresal es un gran equipo que por algo va puntero, a pesar de que en el partido anterior perdió, pero tiene muy buenos jugadores, saben a lo que juegan, van a jugar en su casa y uno tiene que entender de que no es fácil ir a jugar al Salvador. Nosotros tenemos que sumar de a uno, de a tres, pero no tenemos que perder si queremos empezar a salir de la posición en la que estamos, que es bastante vergonzosa para lo que es la institución".