Este conjunto de proyectos de la región aportarán una generación de energía estimada en 514.177KWh al año, lo que significará un ahorro en la cuenta de la factura eléctrica anual de más de 63 millones de pesos por los próximos 20 años. En cuanto al porcentaje promedio de autoconsumo que aportarán las plantas fotovoltaicas para la región de Valparaíso, es de un 49%, las que evitarán emitir unas 197 toneladas de CO2 al medioambiente.
Benjamín Contreras cursa el II Medio B. Lo suyo -y con personalidad- dice son las ciencias. El tema lo prendió: tiene planeado estudiar algo relacionado con la energía electrónica. Por eso considera de orgullo estar en un colegio donde se implementará una revolucionaría iniciativa. "Energía que se ocupará para varios proyectos que además se tienen contemplados más adelante para este colegio" agrega expectante con tinte verde.
Estamos en el Liceo Tecnológico Alfredo Nazar Feres. Con nivel de enseñanza párvula, básica y media, una matrícula de casi 500 alumnos que promedia por curso 23 estudiantes, se considera de excelencia académica. El mismo recinto que hasta el 2006, antes de la inauguración de este actual edificio, "albergaba una especie de cabañitas de media agua. Ahora es una maravilla. Y con estos paneles, damos un gran salto". Quien lo menciona es Marcela Faúndez, profesora de química y ciencias, con casi 18 años de impartir clases acá. "Con esto tendremos a futuros estudiantes especializados en el tema de la energía solar. Somos profesores comprometidos que apoyamos la innovación".
A saber: el Programa Techos Solares Públicos en la región de Valparaíso cuenta con 12 proyectos instalados y conectados a la red eléctrica, bajo la Ley de Generación Distribuida. Ocho de ellos están ubicados en la comuna de Los Andes, dos en San Felipe, uno en Catemu y ahora uno en Valparaíso.
De allí la ceremonia de ayer con bombos y platillos: la construcción aquí de un techo solar como el primer sistema fotovoltaico que se instala en un Liceo de la comuna de Valparaíso, el cual tiene una capacidad de 70 KW lo que corresponde a un 58% del consumo del establecimiento educacional.
Para el seremi de Energía, Gonzalo Le Dantec, la trascendencia de la construcción de este sistema fotovoltaico corresponde al Programa de Techos Solares Públicos que, a su vez, representa la adopción de energías más limpias y eficientes, "a través de la implementación de sistemas fotovoltaicos para autoconsumo en distintos edificios públicos". No es todo para el colegio Alfredo Nazar Feres, además del sistema fotovoltaico, Le Dantec dijo que se instalará un laboratorio de energías renovables con un fin: que los alumnos se familiaricen con estas tecnologías, apoyando el desarrollo educacional.
María Magdalena Acevedo es directora del Liceo Tecnológico Alfredo Nazar Feres desde hace cuatro años. Sostiene que el proyecto se generó por postulación al Ministerio de Energía. "Con pocas esperanzas por los requisitos, perseveramos hasta que lo logramos: esto será de impacto, herramienta fundamental para los estudiantes en estos tiempos. Tener una escuela a futuro sustentable son las líneas de acción a seguir. 63 millones en ahorro a inyectar a la red y lo que no ocupemos, pasará a Chilectra".
Jorge Sharp, jefe comunal, también dijo presente. Tras departir con estudiantes sobre el tema científico, además de destacar este tipo de proyectos para fortalecer a la educación pública de calidad, resaltó el trabajo de la Corporación Municipal de Valparaíso, quien postuló al establecimiento para ser parte de este programa.
Tras el corte de cinta y la placa recordatoria, las autoridades, académicos y estudiantes accedieron hasta el techo. Desde arriba, se pudo apreciar la instalación de los paneles fotovoltaicos, verdaderos biombos sustentables que generan un ahorro de casi 9 millones de pesos al año. Y más: evitarán la emisión de unas 35,7 toneladas de CO2 al medioambiente.
Se observan tres aparatos llamados inversores: reciben la energía del sol que absorben los paneles ubicados en el techo. Jorge Retamal, fiscalizador de la SEC, mira en el techo. Sintetiza: "Aquí los convierten en corriente alterna. Son tres inversores porque hay tres sectores (con una cantidad de paneles distintos entre sí) en función de potencia". En conjunto, acota Retamal, generan 70 kilowatts en potencia máxima. "La energía llega a través de un cableado -de corriente continua-, se hace la conversión y sale convertida en corriente alterna que se deriva a un tablero y de allí a las instalaciones del colegio".
Ya de vuelta al patio, Claudia Muñoz, de segundo medio, comparte con sus compañeros. Debaten. Concuerdan. Muñoz se acerca: "Esto es excelente tanto para el colegio como el medioambiente: así no contaminaremos gracias a estos paneles". Parece matea a la tarea. Lo recalca: "Ahorraremos y beneficiará a la comunidad".
La ocasión hace reflexionar a Jorge Martínez, intendente de la Región de Valparaíso. "Nosotros heredamos de nuestros padres energía a base de carbón". Así, sus palabras a estudiantes como Claudia y Benjamín al proyecto ecológico estandarte: "Deben velar por este nuevo desarrollo sustentable".