Con seis puntos en el bolsillo (producto de sus triunfos frente a Alemania y Corea del Sur el sábado, 2-1), cualquiera diría que México... ya tendría a estas alturas, un boleto asegurado para los octavos de final de la Copa del Mundo.

No obstante, el agónico triunfo de Alemania ante Suecia (la tarde del mismo sábado), también por 2-1, le privó de aquella posibilidad a los dirigidos del técnico Juan Carlos Osorio, los cuales, deberán evitar caer ante los suecos en su partido definitorio, para instalarse en la etapa de los 16 mejores en Rusia 2018. Y es que -analizando la tabla y lo que se viene en el Grupo F- no es para nada descartable un triple empate a 6 puntos en el primer lugar, entre México, Alemania y Suecia. Para que aquello suceda, los alemanes deberían vencer a Corea del Sur en Kazán (en un resultado bastante lógico, por cierto) y Suecia imponerse ante México en Ekaterimburgo.

Bajo este escenario, los clasificados deberían surgir de acuerdo a la diferencia de goles o alguno de los otros criterios que estipula la FIFA, para dirimir igualdades. En tal sentido, lo más lógico es que Alemania golee a los coreanos y saque ventajas en ese sentido. Y si Suecia vence por 1-0 a México... clasifican los suecos. ¿Por qué?. Porque ambos elencos igualarían en todo en la tabla (puntos, diferencia de goles y tantos marcados a favor), por lo que el criterio de desempate sería el partido entre ellos, que le daría la clasificación a los suecos.

Debido a lo anterior es que México debe igualar o vencer a Suecia para clasificar. Lo otro sería que Alemania empate o pierda ante los surcoreanos, lo que ya sería un total y absoluto golpe a la cátedra.

Manuel Gómez Poblete

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