Carla Olivares Rojas

Desde el pasado martes a la fecha, 301 personas han sido atendidas por cuadros de intoxicación en Puchuncaví y Quintero tras las emisiones que se detectaron el pasado martes y jueves en ese sector industrial de la región.

Así lo confirmaron ayer las autoridades encabezadas por el intendente de Valparaíso, Jorge Martínez y el subsecretario de Redes Asistenciales, Luis Castillo, tras realizarse un nuevo Comité de Operaciones de Emergencia, COE, por la contaminación ambiental en Quintero y Puchuncaví.

"Ayer (domingo), se han incorporado 11 personas a las 290 que habíamos anunciado. Siete menores y cuatro adultos, ninguno hasta el minuto de gravedad", precisó la primera autoridad regional.

Por su parte, el subsecretario de Redes Asistenciales, Luis Castillo, anunció que el Gobierno instalará un puesto médico de avanzada en las cercanías del Hospital de Quintero para tratar a los pacientes que han sido afectados con esta situación.

"Puede ayudar a resolver el aumento de tasa de consulta que ha habido con estos episodios que han afectado especialmente a los niños, que es lo que más nos complica", afirmó Castillo.

Junto con ello, detalló que "no quedan enfermos hospitalizados en el Hospital Fricke hoy día, el último enfermo hospitalizado se dio de alta y hemos recorrido las cosas que vamos a implementar de manera de entrar definitivamente al plan de contingencia y ejecutarlo".

El informe de la Seremi

Respecto del o los gases que generaron tal contaminación y la fuente de la emanación, aún se esperan resultados. Enap, parte de cuyas faenas fueron paralizadas temporalmente por Medio Ambiente, ha descartado responsabilidad directa en las emanaciones de hidrocarburos que afectaron a la población y están a la espera de un informe independiente que debería conocerse hoy.

Sin embargo, la polémica se centró en un informe erróneo emanando por la Seremi de Salud, donde se apuntaba a una emisión de dióxido de azufre como causante del primer episodio de "nube tóxica" (el martes 21 de agosto), lo que hizo poner las sospechas sobre Codelco, al punto de que el senador Francisco Chahuán presentara un recurso de protección el sábado pasado al respecto.

En el documento se señala que "como dato para revisión, desde la plataforma AIR VIRO, se pudo obtener un dato de emisión de SO2 (Dióxido de Azufre) desde Codelco de 755 ppm/hrs (partes por millón) a las 09:00 horas (del día 21), lo que podría constituir una desviación a la norma de emisión de fundición del MMA dado que el valor normativo restringe las emisiones a 600 ppm/hrs, lo que podría corresponder a una causa de algunas respuestas sintomáticas al SO2".

Sin embargo, ayer el intendente Martínez reconoció que hubo un error numérico en el informe.

"Hay un oficio y una investigación preliminar de la seremia de Salud a la Superintendencia del Medio Ambiente que contiene un error y que se está corrigiendo en este minuto (...) es un error numérico, es un error de una coma, no es más ni menos que eso..." dijo el intendente.

Y claro, porque en estricto rigor, lo detectado en las mediciones serían 75,5 ppm/hr de dióxido de azufre, algo muy lejano a los 755 partes por millón durante la hora que plantea el informe y que está por sobre la norma de emisión que establece la normativa vigente para fuentes fijas.

Martínez sostuvo que en el sector se han contabilizado a ocho empresas que trabajan con hidrocarburos que son los elementos que se encontraron en la nube tóxica, descartando la participación de material particulado que apuntaba a Coldelco Ventanas como el responsable de la contaminación y que generó la interposición de un recurso de protección en contra de Enap que también apuntaba a Codelco en la Corte de Apelaciones de Valparaíso el sábado recién pasado.

La empresa, además, fue objeto de la furia de los manifestantes el pasado viernes.

El dirigente de la Federación Nacional de Sindicatos de Trabajadores del Petróleo y Afines de Chile (Fenatrapech), Nolberto Díaz, además descartó el posible vínculo de Enap con la nube tóxica y pidió investigar a empresas privadas instaladas en la bahía, como Oxiquim, Gasmar y AES Gener.

La máquina acusete

Ayer, el consejero regional Manuel Millones indicó que, tras sesionar la comisión de Medio Ambiente del Core, se acordó respaldar la compra de tres estaciones de monitoreo móviles para tener disponibles en Concón, Quintero y Puchuncaví.

"Lo que corresponde ahora es que la autoridad nos presente el proyecto para nosotros aprobar y sancionar los recursos para la adquisición de estas máquinas para instalar en estas tres comunas. Aparte respaldaremos la compra de equipamiento de punta para medir la calidad del suelo y la calidad del agua", aseveró el core.

Todo dependerá del tiempo que demoren en presentar el proyecto y que no debiera superar los 45 días. Ahora, estas plantas son móviles y no estarán haciendo mediciones de manera permanente, por eso es que de manera paralela se va a insistir en instalar una planta con las mismas características de medición de más de 120 tipos de gases, pero fija, que esté haciendo un monitoreo permanente y en línea con las autoridades y comunidades locales.

"El problema que se nos va a presentar es que se entiende que las estaciones de monitoreo que hoy existen, miden seis tipo de gases y esta estación va a medir 120, pero la mayoría de estos gases no están en la norma y vamos a tener una alarma pública de muchos gases que van a estar respirando que pueden ser dañinos para la salud, pero que no están legislados, al menos en un principio vamos a saber qué están respirando los niños", aseveró Millones.

Suspensión de clases

Ayer, la intendencia de Valparaíso nuevamente procedió a la suspensión de clases para las comunas de Quintero y Puchuncaví en establecimientos educacionales municipales, particulares subvencionados y jardines infantiles Junji e Integra. De todos modos, se garantizó la entrega de raciones de la Junaeb para los estudiantes.