Extraña desaparición de apicultor en V. Alemana
El hombre de 53 años fue a ver a un amigo en la población Gumercindo y nunca más se supo de él. Previamente había peleado con su pareja.
El jueves pasado, en horas de la tarde, Elías Martínez Salinas (53) salió de la casa de su padre para ver a un amigo apodado "El Chino", en la población Gumercindo de Villa Alemana. De ahí, supuestamente, se pasaría a la casa de su hermana Ernestina para reparar el auto de uno de sus sobrinos, pero nunca llegó.
"Él salió aproximadamente a las 18.00 horas de la casa de mi abuelito en dirección a la casa de su amigo (...) Él refiere que de su casa se fue aproximadamente a las 22.00 horas, y de ahí no se supo más", dice Constanza, una sobrina.
Elías Martínez, quien vivía en el sector de Guangualí, en la comuna de Los Vilos, venía cada tres días a la casa de su padre en Villa Alemana, ya que era apicultor y a la vez se dedicaba a vender paltas. Fue en uno de estos viajes que se le perdió el rastro.
"El tata, cuando vio que no llegaba, dijo que tenía un mal presentimiento. Lo llamamos y tenía el celular apagado. Lo salimos a buscar, pero no hemos tenido novedades hasta el día de hoy (ayer). Estamos desesperados porque mi suegro es una muy buena persona y muy unido a su padre. De hecho, compartían la pieza para pasar más tiempo juntos", dice Belén Gómez, su nuera.
Peleó con su pareja
Constanza, su sobrina, agrega que el sábado puso una denuncia por presunta desgracia en Carabineros. "Andaba de jeans azul, zapatillas oscuras y un polerón gris (...) Mis primos, hijos de mi tío Elías, hablaron con su amigo, pero sólo les dijo eso, que se fue a las 22.00 horas", acota.
La nuera, por su parte, teme lo peor. "Estamos angustiados porque después de lo que pasó con el profesor Nibaldo, uno piensa lo peor. Aparte, justo antes de venirse de Los Vilos, se había peleado con su pareja. Le había dicho que la perdonara por lo que iba a hacer, que todavía la amaba, pero que no podían estar más juntos y que vendiera los chanchos y las gallinas para mantenerse", consigna.
Belén Gómez asegura que llamó a la pareja de Martínez para preguntarle si estaba con él. "Como tenemos confianza, la contacté, pero me dijo que no estaba con ella y que ya sabía que estaba desaparecido. Yo la reté porque no nos había avisado, pero ella dijo que pelearon el martes. El miércoles mi suegro se vino a Villa Alemana y el jueves desapareció. Es muy raro", expresa.
Ronald Martínez, nieto del apicultor, manifiesta que ese día jueves 9 de septiembre lo vio igual que siempre.
"Estaba muy animado, contento, como siempre. Incluso hablamos de que quería cruzar a los chanchos. Lo que nos preocupa, es que si se fue para los cerros, nos va a costar encontrarlo, porque si se quería esconder, los conoce como la palma de su mano", cerró.