En el horizonte caturro se acercan rivales contra los que ya se sufrió
En marco de la primera rueda, y ante los siete oponentes que le restan, Wanderers apenas sumó dos victorias.
Definitivamente los objetivos en Wanderers ya cambiaron y la esperanza de conseguir el ascenso está más viva que nunca en jugadores e hinchas porteños. Las cinco victorias consecitvas obtenidas de la mano de Miguel Ramírez, fueron el empujón de confianza necesario que nunca se pudo encontrar en los procesos comandados por Nicolás Córdova y Moisés Villarroel, quienes pese a intentarlo, nunca pudieron levantar el ánimo de un alicaído camarín que logró reaccionar a tiempo y aún tiene chances para lograr subir de categoría.
Una vez finalizado el receso producto de las fietas patrias, el Decano entrará de lleno a la recta final del campeonato, donde si bien, tiene un calendario que se podría consirar como favorable dado que ya jugó con una importante cantidad de equipos que están en la parte alta de la tabla de ubicaciones, el horizonte de todas formas se mira con recelo dado que, ante sus últimos siete oponentes, consiguió muy buenos resultados en la primera rueda del torneo.
Más en lo específico, el Decano consiguió apenas dos victorias, otros dos empates, y tres derrotas frente a sus más próximos oponentes. Para poner el panorama aún más cuesta arriba, los verdes no consiguieron sumar de a tres ante los primeros cinco equipos contra los que deberá medirse proximamente, antecedente que deberá cambiar si es que quiere suoñar con el ascenso.