Hasta bien adentro del partido jugado ayer en Playa Ancha, el comportamiento de los hinchas que acudieron a la galería norte del "Elías Figueroa" (sector de "Los Panzers") había sido impecable... eso, hasta que un "angelito"... de esos que nunca faltan, ni fallan... encendió una bengala a sabiendas de que la barra caturra está más que cuestionada por las autoridades del fútbol y Estadio Seguro. Tras ocultar su rostro con sus propias vestimentas, el individuo de la imagen superior le entregó la "posta" a una joven, quien, hasta saltos se pegó con la bengala en mano... como si fuera una gracia lo que hacía.

Al final del encuentro se informó que hubo un solo detenido, mientras que mañana se sabrá si Wanderers podrá jugar con hinchas (o por el contrario, serán castigados) el próximo fin de semana ante Copiapó.

"Hoy día enfrentábamos a un rival que colectivamente es muy fuerte, al igual que en el juego aéreo y en la disposición para generar espacios. Y eso indudablemente que a nosotros nos tenía con mucha tensión. Y cuando enfrentas a un rival de categoría o que juega bien al fútbol, iniciar ganando es lo ideal. A pesar de eso, ellos en ningún momento bajaron los brazos, sino que todo lo contrario", señaló en el arranque de su análisis, el técnico de Wanderers, Miguel Ramírez.

Y si bien, el estratega porteño indicó que se enfrentaban dos cuadros de virtudes y fuerzas muy similares, rápidamente agregó que "las diferencias las pudimos trasladar a nuestro favor, jugando e insistiendo en nuestra forma. La calidad de goles que hoy hicimos fueron producto del juego colectivo, nuestros tres delanteros marcaron, cosa que no es común. Hubo rendimientos individuales muy altos y por ello hay que estar contentos. Son tres puntos que nos permiten seguir escalando y también ilusionarnos".

Equipo con rEACCIóN

En relación al bajón que a ratos tuvo el equipo -especialmente en el segundo tiempo- el técnico Ramírez indicó que "lo importante es que el equipo tuvo la capacidad de reaccionar y cerrar el partido y lo hicimos con goles y no echándonos atrás, aguantando o especulando. Wanderers está siendo trabajado para ir siempre hacia arriba, independiente al equipo que tengamos enfrente. Este equipo tiene que seguir marcando, porque además, tenemos que achicar la diferencia de goles que tenemos en contra".

Y en cuanto a sus individualidades, Ramírez prefirió alabar al colectivo, asumiendo que el grupo es el que anda a buen nivel.