"Clavito" Godoy se retiró triste y en silencio del estadio
Minutos antes de iniciado el pleito entre Wanderers y San Marcos de Arica, el técnico visitante, Hernán "Clavito" Godoy, ya nos había anticipado que -cualquiera sea el resultado final del partido- no iba a hablar tras el encuentro, ya que al estar castigado por el tribunal de Disciplina de la ANFP, aquello le implicaría una sanción mayor.
Por lo mismo, "Clavito" llegó temprano y se instaló en la caseta radial número siete del estadio, en donde, acompañado por su esposa, vivió y sufrió con el accionar de sus dirigidos, quienes fueron guiados en cancha por Jorge Molina y Justo Farrán.
Previo al compromiso, eso sí, el ex jugador de Wanderers recibió el saludo de varios ex jugadores y directivos de Wanderers, entre ellos, Osvaldo León, Hernán Cortés y, por cierto, Elías Figueroa, quien llegó con su hijo y uno de sus nietos.
De hecho, el técnico tenía pensado abandonar minutos antes del pitazo final, el recinto deportivo. Pero el rigor de la lucha, se lo impidió. Incluso, finalizado el partido, el técnico y su mujer se quedaron alrededor de 40 minutos, encerrados en la caseta. "Clavito" miraba y miraba la cancha, como buscando una explicación. Y a ratos hablaba por su teléfono celular. Su mujer, en tanto, lo contemplaba, atenta a los gestos de su compañero, quien, en un lugar que tanto quiere como el puerto de Valparaíso, no lo estaba pasando bien.
Al retirarse, Godoy insistió en que no podía hablar, porque estaba castigado. "De no ser así, encantado hablo con ustedes", reiteró y se reitiró en silencio.