Santiago Wanderers gozó de un superlativo apoyo en las gradas, más de 11 mil hinchas asistimos para apoyar en el último cotejo de la temporada regular. Wanderers buscaba asegurar definir de local la fase de liguilla. Todo se complicaría ante la displicencia de la defensa verde en el primer gol de Arica, en que nadie despejó el balón y Viana estuvo flojo en la contención. Pero, el conjunto verde elabora bien, toca y descarga por toda la cancha, lo que le permitió igualar con el irregular Viotti y desequilibrar a través de un certero cabezazo de Luna mediante balón parado. A falta de 15 minutos, el gol de Luna fue un ansiolítico de 500 gramos que calmaba la ansiedad verde. No podía faltar la guinda de la torta, quedando escasos minutos se produjo un magnánimo saqueo pitando un penal inexistente en el final del cotejo. Arica igualó y no le alcanzó.

Ramírez deberá trabajar el cómo cerrar los partidos y mejorar el tan esquivo finiquito de las jugadas para amarrar la liguilla y obtener el divino ascenso a la división de honor.

José Luis Trevia

Las redes sociales para muchos han sido una revolución en temas de conectividad y puntos de encuentro, sin embargo, como muchas cosas en el mundo, hay que tomarlo con resguardo en torno a informaciones que circulan y también información que se expone.

En redes como Facebook claramente uno puede observar información que no es veraz, al igual que opiniones que en otras instancias parecen ser poco serias.

Estas plataformas muchas veces pueden ser muy útiles, pero otras es sumamente peligroso al exponer datos privados y de una u otra forma legitimar un lenguaje violento que muy poco aporta a la sociedad.

Francisco Sánchez

Llama la atención que con motivo de un partido de fútbol, sin siquiera mencionar que son clubes de segunda división, se malgasten tantos recursos policiales con el consiguiente malestar para los vecinos de Playa Ancha al desviarse el tráfico de la locomoción colectiva.

Si ya se tienen ubicados a los delincuentes mal llamados "barristas" de Wanderers, por qué el despliegue policial que pareciera zona de guerra todo el sector que circunda al Estadio Elias Figueroa.

¿Hasta cuándo se permite que estos desalmados hagan de las suyas? ¿Qué pasa con Estadio Seguro? ¿Qué opina el Club decano del fútbol profesional? ¿Quién le pondrá el cascabel al gato?

Leopoldo Vásquez