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Cruce habilitado, pero no regulado

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El capitán Carlos Sepúlveda, jefe de la SIAT de Talca, fue quien se hizo cargo del accidente que le costó la vida a la familia de Michael. En la oportunidad, explicó que el hecho ocurrió en un cruce habilitado, pero que no está regulado. "Está a la libre disposición del conductor y la atención que él toma al momento de efectuar el cruce. Ante aquello, desde el cruce hasta donde queda el vehículo hay 170 metros aproximadamente de trayectoria, en el cual fue arrastrado el vehículo por el automotor. Producto de este impacto y la magnitud del impacto fallecen siete personas y un octavo está en riesgo vital", dijo. Esa octava persona fue Michael González, el único sobreviviente.

Niño sobreviviente de terrible accidente pide un auto de regalo

Michael González tenía 6 años cuando un tren arrolló el vehículo en el que iba con sus padres y hermanos, en San Javier. Ahora vive con su única abuela en Viña del Mar.
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Cinthia Matus O.

El domingo 7 de febrero de 2016, Michael González Bernal, de 6 años, andaba con sus padres, dos hermanos, abuela paterna y una tía, paseando en auto por la localidad de San Javier, en la región del Maule.

En eso, cuando llegaron hasta el Cruce Santa Cecilia, un tren los impactó por el costado, y siete de los pasajeros fallecieron instantáneamente. El único que sobrevivió fue Michael.

El menor fue trasladado de inmediato hasta el hospital de Talca, en donde permaneció en estado de coma durante tres meses y medio. Allí se aferró a la vida y a mediados de mayo de 2016, fue trasladado hasta el hospital Gustavo Fricke de Viña del Mar en donde quedó internado durante una semana. Posteriormente, por la gravedad de sus lesiones, fue derivado al hospital Carlos Van Buren de Valparaíso, en donde permaneció hospitalizado un mes y medio.

Niño optimista

Michael González Bernal fue dado de alta y su abuela Juana Mondaca, que vive con su esposo en la calle Crucero La Torre de Glorias Navales, en Viña del Mar, se hizo cargo de él. Era su único familiar cercano.

"Para mí, el niño es el recuerdo de mi hija y mis nietos que fallecieron. Fue tan terrible el accidente, pero él se quedó para consolarme, Michael son mis ojos", manifiesta la mujer, que lo cuida como un verdadero tesoro.

Michael, que actualmente tiene 9 años de edad, está en una silla de ruedas, tiene un fierro en su pierna izquierda y una placa que le afirma el cráneo. Es un niño muy alegre, pese a que todavía no puede ir al colegio.

"Michael siempre se está dando ánimo. El día lunes 17 tuvo control y el médico lo encontró súper bien, pero después cuando en enfermería le sacaron los puntos se le abrió la herida y tuvo unas complicaciones, pero eso no lo amarga", comenta la abuela.

El niño producto del accidente también perdió 40% de su visión. "A mi nieto le han abierto cuatro veces la cabeza porque la placa que tenía el cuerpo se la rechazaba. Ahora por fin le creció el cuerito y todo, pero se le está corriendo un poco para abajo. Esperamos que se le arregle pronto", dice Juana Mondaca.

Michael González Bernal asiste todas las semanas a unas terapias de kinesiología en la Teletón, como también a terapias de educación y sicología. "De a poco va retomando una vida normal, pero no ha sido fácil. Tiene que adaptarse a muchas cosas, ya que no puede caminar mucho tampoco", explica la abuela; Michael sólo sonríe.

Sin Navidad

Tal es el cuidado que el menor requiere, que ni siquiera han podido prepararse para celebrar la Navidad. Juana Mondaca comenta que su esposo trabaja harto en una hojalatería para darles de comer, pero con tantos tratamientos y visitas a médicos, no tienen ni siquiera para armar un árbol de pascua.

Michael González Bernal, como todo niño de su edad, desea aunque sea un regalo. "Me encantaría tener un auto de juguete a control remoto", dice tímido.

La abuela le da un cariño y explica que todos sus juguetes quedaron perdidos en Talca, un lugar que no quieren recordar mucho por lo que sucedió. "A uno a veces le baja la pena, pero este niño me ha consolado, por eso quiero que sea muy feliz y consiga sus sueños", expresó la abuela. Si alguien desea regalarle el auto o cualquier otro juguete a Michael, puede ponerse en contacto con su abuela al +56975315461.