Si bien los jugadores de fútbol siempre aspiran a llegar a algún equipo tradicional y ojalá de primera división, hay otros busquillas que no tienen problemas en experimentar y practicar otras disciplinas derivadas del balonpié. Uno de ellos es el villalemanino Mirko Valencia (26 años) quien fue seleccionado nacional de fútbol calle y hoy ejerce como preparador físico del la "Roja" de esta especialidad.

En crecimiento

"Siempre he estado ligado al fútbol -cuenta este deportista- desde chico me gustó. Jugué en Argentina, en Huracán Las Heras de Mendoza (2012-13) y el año pasado me nominaron a la selección de fútbol calle para jugar una Copa América".

En ese momento formaba parte de selección de fútbol de la Universidad Santo Tomás -estudiaba Ingeniería en Minas-, lo vieron y lo seleccionaron para para el torneo realizado en Costa Rica, en el que quedaron segundos. "Perdimos la final contra Brasil", cuenta.

Tras esa experiencia se le abrió la posibilidad de seguir como profesor en el equipo nacional de fútbol calle. "Fuimos al Mundial de Noruega, estoy a cargo de la parte física, como es un cuerpo técnico pequeño trabajamos todos juntos, los tres profesores, en estrategias técnico tácticas".

Mirko Valencia cuenta que el fútbol calle está en Chile desde el 2006 y a partir de ese año la selección participa en los diferentes mudiales y Copas América. Chile albergó una Copa América en el 2013 y un Mundial.

"Existe la Federación que es la Homeless World Cup, una especie de Fifa del fútbol calle. Partió como un proyecto orientado a la reinserción para que chicos puedan encontrar en el fútbol una oportunidad para que puedan superar problemas derivados del consumo de drogas o delincuencia", explica el jugador, quien además comenta que la especialidad se ha profesionalizado "pero todavía se prioriza a los jugadores que tienen algún tipo de problema socia", advierte.

En cuanto a la forma de juego, Mirko Valencia señala que la selección se compone de 8 jugadores, de los cuales entran al partido 4 y los otros quedan para el cambio.

¿Cuáles son las reglas? Se juega con un arquero y tres jugadores de cancha. Se ataca con tres y se defiende con dos, por lo tanto siempre se defiende con inferioridad numérica. "Hay que ser muy táctico y paciente para poder jugar el fútbol calle", comenta Valencia.

Si bien se juega en cualquier superficie, en los mundiales se hace en canchas de pasto sintético que tienen paredes. "La pelota no sale nunca, a menos que sobrepase la pared que mide un metro diez. El arquero no puede salir de su área. No está permitido 'barrerse', es un deporte que promueve el fair play y hay muchas cosas que no están permitidas".

Además de ser el profesor del equipo, Mirko Valencia recorre diferentes municipalidades buscando talentos para incorporar a los campeonatos. Ahora espera poder conquistar a los jóvenes de Villa Alemana, su ciudad natal, para que se entusiasmen con este deporte que puede ser una opción para quienes sueñan con ponerse alguna vez la tricota de la Roja.