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Despiden a funcionario que destapó infidelidad

Operador de cámara de vigilancia de Quintero aprovechó su trabajo para enviar instantáneas de una infidelidad generando una crisis familiar.
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Carla Olivares Rojas

Un quiebre matrimonial y una gran crisis familiar desató la filtración de unas fotografías de una mujer en una romántica escena en la Plaza de Armas de Quintero.

Fue el operador de las cámaras de vigilancia municipales que, al reconocer a la mujer besándose con un hombre que no era su esposo, decidió realizar capturas del momento y enviarlas por whatsapp a la víctima de la infidelidad.

Esto, generó que la mujer viviera una profunda crisis no solo con su esposo que fue a encararla a su lugar de trabajo, sino que también con sus cinco hijos, quienes se alejaron de ella tras enterarse de la infidelidad. La mujer debió dejar el domicilio familiar.

Operador despedido

Esto generó que la mujer contratara los servicios de un abogado para demandar al municipio por el delito de "daño moral" dado que las cámaras de vigilancia tienen un fin distinto al utilizado por el funcionario.

Por ello es que de inmediato se dio inicio a una investigación a cargo del director de Seguridad Pública, pero gracias a los propios compañeros de trabajo que delataron al soplón que filtró las imágenes, éste fue de inmediato separado de sus funciones.

Se trata de un operador de cámara de una empresa externa y que no pertenece al municipio.

Según dijo a El Mercurio José Aguirre, abogado de la mujer, "la regulación de las cámaras de seguridad de los municipios es exigua, pero hay tratados internacionales firmados por Chile que resguardan la privacidad e intimidad".

Y claro, porque el fin de las cámaras de televigilancia son advertir sobre situaciones que ponen el riesgo a la comunidad y no destapar infidelidades como ocurrió en la comuna de Quintero.

lev
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Municipio aclaró que el funcionario pertenecía a una empresa externa.
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Menor que asaltó y golpeó a porteña fue detenido en su domicilio

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El 7 de diciembre de 2017, una mujer de la tercera edad fue asaltada llegando a su domicilio en calle Santo Domingo en el Puerto. Un menor de edad la abordó por sorpresa y tras empujarla y agredirla le fracturó la nariz y el brazo izquierdo. La víctima, sin posibilidad de defenderse y sin testigos, pues el hecho se produjo pasadas las 23.00 horas, quedó sin sus pertenencias avaluadas en más de 2 millones de pesos.

TREs años en sename

El trabajo desplegado por la PDI porteña, específicamente de la Brigada Investigadora de Robos, logró detener a B.A.M.R. (18 años), por su responsabilidad en el delito de robo con violencia, el cual fue sentenciado a tres años de prisión efectiva en el Sename, pues cuando sucedieron los hechos era menor de edad. A 15 meses del delito, el autor del asalto fue detenido en su propio domicilio, pues hubo medios de pruebas necesarios para establecer fehacientemente la participación del sujeto en los hechos. Incluso la víctima pudo reconocerlo, pese a que actualmente vive fuera del país.

B.A.M.R. poseía antecedentes por robo por sorpresa, es por eso que el Ministerio Público emitió una condena ejemplar para el joven que ahora ya es mayor de edad.

La víctima, quien actualmente posee domicilio en el extranjero, pero en ese entonces era vecina del delincuente, pasó meses lesionada y debió soportar la sustracción de su celular de alta gama, dinero y joyas por un monto de más de 2 millones de pesos.

marcelo benitez
marcelo benitez
LA calle santo domingo ha protagonizado varios asaltos.
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