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Entre lágrimas testificó el hijo del profesor Nibaldo

Estremecedor relato de Alejandro Villegas Oyanedel. El joven de 22 años reconoció que tienen temor y que esperan el máximo castigo.
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Priscilla Barrera Ll.

Con solo 22 años, Alejandro Villegas Oyanedel ha debido enfrentar la dura tristeza de perder a su padre de la peor manera que podría haberlo hecho: asesinado cruelmente por quien fuera su esposa y la pareja de ésta.

Ayer pasadas las 9 de la mañana, el mayor de los hijos del profesor Nibaldo, prestó su testimonio ante los magistrados de la Sala 4 del Tribunal Oral en Lo Penal de Viña del Mar.

No habían pasado 4 minutos cuando su voz se quebró por primera vez, al relatar que iba en la micro cuando le comunicaron que el torso encontrado en el Muelle Prat pertenecía a su padre. Un silencio inundó la sala. Sus familiares intentaban no quebrarse, pero era imposible no hacerlo.

El joven bebió un sorbo de agua y continuó. Ya había afirmado que la desaparición de su padre inmediatamente les había inquietado pues Nibaldo era una persona comprometida y que no era de los que dejaba a su hija botada.

Episodio violento

El joven dijo conocer a Johanna cuando él cursaba séptimo u octavo y que con ella tuvo una relación de respeto, como la esposa de su papá. Sin embargo, relató un episodio particular de violencia. Sostuvo que cuando Johanna inició su práctica profesional, comenzó a tener una actitud fría con su padre. Que dormían separados y que hubo un último episodio que le causó pena y tristeza. Johanna insultó con duros improperios a su padre y le lanzó una piedra a su auto.

"Me dio rabia, mi papá no se merecía que lo trataran así", sostuvo el joven estudiante.

Con voz quebrada, Alejandro relató la desesperación en la búsqueda. "No sabíamos qué buscábamos, cualquier indicio", dijo. Asimismo, compartió que todo lo vivido ha ido en incremento, el dolor, la pena. Que dejó de trabajar producto del estrés y que aún no logra retomar sus estudios.

"Cambian muchas cosas con la pérdida de un padre. Tengo una hermana menor de 8 años, es super duro avanzar", relató con dificultad.

Sobre su hermana de 8 años, dijo que hablan sin detalle de la ausencia del padre y que tienen miedo de los acusados. "Estamos con miedo, sería impactante verlos a ellos en la calle, para mí y aún peor para mi hermana, por eso espero el máximo castigo", planteó.

Incidente

Ayer, como ha sido la tónica cada día, familiares y amigos se manifestaron a la entrada y salida de los acusados al tribunal. Sin embargo, ayer, personal de Gendarmería armado descendió de los carros, lo que provocó la reacción de los manifestantes. Entre ellos, Vilma Villegas, hermana de Nibaldo, quien sufrió una descompensación.

nota suicida

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Triangulación y tráfico de llamadas telefónicas, recuperación de metadatos de teléfonos celulares, entre otras, permitieron a la Policía de Investigaciones obtener valiosa información que había sido eliminada desde los teléfonos celulares de los coacusados Johanna Hernández y Francisco Silva, quienes el 17 de agosto, habían prestado declaración en calidad de testigos en la BH, manifestando su voluntad de colaborar en todas las diligencias tendientes a ubicar a Nibaldo, pero sin embargo omitiendo valiosa información.

Entre la información no entregada provocó especial impacto la exhibición de las dos fotografías tomadas por Johanna a Nibaldo Villegas, donde el profesor aparece dormido en una imagen en primer plano de su rostro y una segunda, tendido sobre la cama, totalmente inconciente. Ambas imágenes, Johanna se las envió a Francisco para confirmar que parte del plan ya estaba en marcha.

Más impactante aún, pues los familiares desconocían de su existencia, fue conocer que un par de horas antes de que Johanna se encontrara con Nibaldo en su casa ese viernes 10 de agosto, ella y Francisco redactaron una nota suicida en la aplicación "color note". De acuerdo a lo señalado ayer por Alarcón, la primera planificación de los coacusados, según sus propios dichos, era poder darle muerte a Nibaldo ejecutándole cortes en los brazos que apuntaran hacia un suicidio. Sin embargo, más allá de las palabras, también fue posible recuperar una nota: "La oficina de análisis logra recuperar una imagen borrada en la aplicación 'note color' en el teléfono de Francisco Silva, hay una nota digital a nombre de Nibaldo y el texto señala, a grandes rasgos: 'Por favor Nibaldo no me busques más, no insistas, yo no voy a seguir contigo. Si quieres atentar contra ti hazlo, esta va a ser la última vez que yo tome contacto contigo, no quiero saber nada de ti. Yo estoy feliz con Fran, él ha sabido ganarse el cariño y el respeto de mis hijos lo que tú no pudiste hacer'".