
Wanderers no estuvo a la altura
El Decano hizo agua en la zona defensiva y se comió cuatro goles en los primeros 30 minutos de juego. Con esta derrota, los verdes cedieron la punta de la Primera B.
Un completo y total desastre. No hay otra forma de definir lo que fue la presentación de Wanderers ante Cobreloa en Calama. Si bien el escenario y el rival, en el papel, auguraban una difícil misión para el Decano, ni el más pesimista de los hinchas verdes esperaba comerse una boleta como la de ayer, mostrando errores que un equipo que tiene aspiración de volver a Primera División, no puede volver a cometer.
Una rebelde molestia en su rodilla obligó a Jorge Ampuero a quedarse fuera de los 18 citados para el compromiso, lo que provocó que Miguel Ramírez debiese improvisar una nueva línea de tres en el fondo, experimento que hizo recordar los peores momentos de este equipo con Nicolás Córdova sentado en la banca.
Al otro lado de la cancha, estaba un Cobreloa que siempre se hace fuerte en casa, que fue altamente efectivo, sobretodo en los primeros pasajes del encuentro, y que al mismo tiempo sabía que, si lograba derrotar a los porteños, le arrebatarían la cima de la Primera B.
Un hábil Ignacio Jara, imparable durante todo el partido, fue el encargado de abrir el marcador para los "loínos" recién en cuatro minutos de lance. El volante seleccionado sub 23 ganó por la banda izquierda, luego de Cerezo quedara corto en un despeje de cabeza, y en el corazón del área, terminó introduciendo el balón entre la salida de Mauricio Viana y un intento de despeje por parte de Ezequiel Luna.
El tanto fue un golpe anímico que los naranja no desperdiciaron, y cinco minutos después, tras un mamarracho por parte de Mario López, Lara quedó completamente solo, cedió a Abán y este último decretó la segunda diana del compromiso.
Un disparo de Lanaro cuando el marcador estaba 1-0, y un posterior tanto anulado a Luna con el 2-0 abajo en el marcador, fueron las principales llegadas de un Decano que todavía tenía mucho más por sufrir. A través de un saque de esquina, y luego de que Cerezo fallara en la marca, el argentino Gonzalo Abán volvió a inflar las redes en lo que ya era una verdadera paliza.
La guinda de la torta, y antes de bajar el pie del acelerador, la puso Sebastián Romero luego de un tremendo desborde del incombustible Lara que había encontrado un pasadizo, esta vez, por el sector derecho del ataque local.
El del honor
Para la segunda mitad, Miguel Ramírez dispuso de los ingresos inmediatos de Luis García y Lionel Altamirano, buscando, primero, ordenar el esquema, y también conseguir el milagro del repunte. El Decano no recibió más goles, aunque esto se debió principalmente a que Cobreloa comenzó a controlar el partido a su antojo dada la abultada diferencia en el marcador, mientras los verdes buscaban, principalmente a través de los centros, poder inquietar la portería custodiada por el ex golero de Everton. Claudio González.
A cinco minutos del final y luego de ganar de muy buena forma un balón poniendo su cuerpo, Lionel Altamirano se tiró al piso para definir y anotar el que fue el único descuento de los porteños, tanto que sirvió solo para la estadística.
El elenco caturro, de esta forma, sumó su segunda derrota consecutiva, lo que le valió ceder el liderato del torneo. Si bien todavía quedan largas 20 fechas por disputarse, y Wanderers tiene argumentos de sobra para pelear hasta el final, preocupa el saber que ante la presión, el Decano pueda mostrar una cara tan fea.