Hace 43 años que Juan Amaya se convirtió en socio del Decano del fútbol chileno, y desde allí, ir a Playa Ancha a apoyar al equipo se ha convertido en una sagrada tradición; además es presidente de la Barra Oficial de Santiago Wanderers, agrupación de hinchas que está compuesta, en su mayoría, por wanderinos de la tercera edad. El docente, por lo mismo, es voz autorizada para hablar sobre la evolución que ha tenido el hincha wanderino en general, el cual, en los últimos años, ha demostrado su descontento hacia el manejo del club, con diversos tipos de manifestaciones.

- Me imagino que le ha tocado estar con Wanderers en las buenas, y sobretodo en las malas.

-Sí, tuve la felicidad de estar en Buenos Aires para el partido con Boca, y también me ha tocado estar en los descensos. Allá por el 70, cuando bajamos por primera vez, fui a Santiago para los tres partidos de la liguilla. En la primera fueron más de 10 buses, en la segunda como cinco, y en la última íbamos tres buses, porque ya estaba definida la situación.

- ¿En sus viajes ha ratificado la fama que tienen los hinchas del club, quienes se proclaman como una de las parcialidades más fieles?

-Sin dudas. He vivido fuera de Valparaíso y la gente inmediatamente te pregunta si eres de Wanderers. Hay muchas personas de otros lados, que si bien tiene su club, de todos modos sienten un cariño por Wanderers. Incluso hay hinchas acérrimos de la "U" o Colo Colo que tienen un sentimiento muy especial por este equipo.

- La edad, me imagino, no es impedimento para alentar a Wanderers en el estadio.

-No, nosotros como Barra oficial tenemos cierta fuerza de local, del grupo total nuestro, un alto porcentaje va al estadio, y el que no va, manda a un familiar, así que se mantiene nuestra presencia.

- ¿Ha visto un cambio en los hinchas durante todos los años en que ha asistido al estadio?

-Sí, por supuesto, y en todo ámbito. El tiempo, además, ha hecho un cambio en la parte social, y eso se ha ido notando en el fútbol. Por lo mismo tenemos ahora el problema de la hinchada con respecto a las instituciones que gobiernan la mayoría de los clubes deportivos.

- En el caso de Wanderers, esta división se ve muy reflejada por parte de los hinchas, quienes han hecho varias manifestaciones por su molestia.

-Sí claro, y nosotros como Barra Oficial, en un momento determinado, también accedimos a esas manifestaciones con respecto a la gestión de la sociedad anónima. Como institución fuimos llamados por distintas agrupaciones y participamos en eso de los globos negros, pero con una condición que finalmente no se cumplió, que era tener mesura y tranquilidad respecto a esa protesta que estábamos realizando las agrupaciones wanderinas. Como no se cumplió, nuestra institución se retiró inmediatamente de ese proceso, que creo tampoco cundió mucho. Pero nosotros, por una cuestión de principios, ponemos primero al club, porque tenemos un poco menos de la mitad de los años que tiene la institución, y somos además la primera barra oficial de un equipo de todo el fútbol en Chile, por lo mismo tenemos un prestigio que nos obliga a tener cierta conducta.

- ¿Siente que estos actos restan más de lo que suman?

-Es que a la larga nos perjudican, porque hemos tenido partidos sin público. Además, lo que más duele, es que son grupos minoritarios, a veces no sé si llamarlos con un concepto más fuerte, que sería radicalizados. No hay un razonamiento por su actitud. Se puede reclamar, pero no causar daño, y lo que estos muchachos nunca han entendido es que al final le causan un daño a la institución.

-¿Cree que se pueda enmendar el camino?

-Es difícil, porque tienen que ir pasando generaciones. Lo más probable es que en los próximos cinco o seis años, no vayamos a tener este cambio, pero sí podemos tenerlo a medida que la sociedad vaya cambiando y vayamos adquiriendo algunos conceptos fundamentales, como lo es el respeto, porque este se perdió totalmente. Hoy, es cosa de ir caminando, donde si topas por casualidad a otra persona, ésta te increpa.

- ¿Han sentido que como Barra Oficial les han faltado el respeto?

- Una vez, como Barra Oficial fuimos a un partido fuera de Valparaíso, y obviamente a la hinchada visitante la ubican en un determinado lugar. Nosotros quedamos junto a las agrupaciones de jóvenes wanderinos, y nos empezaron a insultar porque nosotros no gritábamos como ellos. Comprenderás que nuestra forma de alentar es nuestra presencia fundamentalmente, no vamos a tocar el bombo.

Juan Amaya, presidente de la Barra Oficial de Wanderers:

"Nos han insultado

por no gritar"

"Nos han insultado

por no gritar"

Nicolás Arancibia Bórquez

nicolas.arancibia@estrellavalpo.cl