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Joyita española de Netflix

Todo el mundo habla de "La casa de papel" y de "Vis a Vis". Del boom de la ficción española. Sin embargo, ninguna de las series hispanas de la actualidad tiene el encanto incombustible de "Paquita Salas", la comedia creada por Javier Ambrossi y Javier Calvo (Los Javis), que protagoniza el actor Brays Efe, la cual acaba de estrenar su tercera temporada en Netflix, siguiendo las aventuras y desventuras de una representante de actores que tuvo su época de gloria en los 90. Con fax y teléfono fijo. Sin mail ni redes sociales.

En la tercera temporada, con seis capítulos de media hora, Paquita se las ingenia para salir adelante tras verse obligada a cerrar su oficina. Y si en los dos primeros ciclos hubo cameos de Paz Vega ("Spanglish") y Ana Obregón ("Ana y los siete"), ahora nos encontramos con Úrsula Corberó ("La casa de papel") y Josh Hutcherson ("Los juegos del hambre").

Registrada bajo el formato del mockumentary (falso documental), la serie es retorcidamente divertida en su dibujo de las miserias del mundo del espectáculo. Hay algo del primer Almodóvar y sus comedias desatadas en "Paquita Salas", pero en clave millennial. La serie se ríe en este nuevo ciclo de las redes sociales, los youtubers, los influencers y toda aquella gente a la cual se le va la vida en un tuit o que muere por un like.

Los actores y sus egos también son protagonistas. Los vemos en momentos íntimos, tras pasar por la alfombra roja y posar para los fotógrafos. En sus casas, en bares y en baños. O en los temibles casting. Desfilan por el programa estrellas en ascenso y otras en picada. Y al lado de ellos siempre está Paquita, para bajarles los humos y recordarles que nada están terrible y el espectáculo es eso, espectáculo.

El show debe seguir y Paquita Salas siempre que cae se levanta. Una y otra vez. Ya no representa a actores clase A como en sus mejores tiempos. El medio audiovisual es cruel y la desecha, porque Paquita Salas es un dinosaurio, pero aunque sus métodos no sean los más aceptables o éticos, es imposible no empatizar con ella y su inquebrantable voluntad.

Paquita no es un personaje unidimensional, sino que un ser complejo, que se aferra con uñas y dientes a la luces del show business, tan políticamente incorrecto como encantador. Y el actor Brays Efe borda un papel entrañable, convenciendo y emocionando a la vez con su caracterización. Mientras que los secundarios también brillan, en especial Belén Cuesta como Magüi, la fiel asistente de la protagonista. "Paquita Salas" es la joyita española de Netflix. Hay que darse el tiempo para descubrirla y amarla.

título: Paquita Salas (tercera temporada)

elenco: Brays Efe, Belén Cuesta, Lidia San José,

Anna Castillo.

dónde verla: Netflix

[Cultura Urbana]

Lukax Santana invitó a su viaje por el espacio sideral

El músico experimental viñamarino, con más de tres décadas de trayectoria en Europa, hizo que los porteños gozaran con su capacidad de improvisación.

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Mirian Mondaca Herrera - La Estrella de Valparaíso

Siete terrícolas refugiados en una estación espacial receptora perdida en algún rincón del universo, emitiendo señales para demostrar que siguen con vida. Esa fue la experiencia onírica que tuvieron los porteños que llegaron hasta el Teatro Mauri SCD, emplazado en el cerro Bellavista, para disfrutar de la genialidad del músico experimental viñamarino Lukax Santana y su obra "Big-Bang", que es parte de su proyecto "Lúcuma_Estación Receptora de Ondas Sónicas Cósmicas".

Hace nueve años que el artista regresó a Chile de su experiencia de tres décadas en Europa, y en ese tiempo ha contribuido fuertemente a sembrar en territorio nacional la semilla de la experimentación sonora, mediante el uso de botellas, tarros, resortes, plásticos y resortes, entre otros elementos de desecho y cotidianos, que se pueden encontrar fácilmente en una casa. Su carrera, recuerda el viñamarino, comenzó en el Viejo Contiente. "Empecé en Londres, en 1984, cuando formamos el primer grupo chileno y latinamericano de música experimental, que se llama Quilombo Espontáneo, y de ahí vengo interesándome específcamente más que en los instrumetos, en sonidos".

Explosión de sonidos

El proyecto "Lúcuma_Estación Receptora de Ondas Sónicas Cósmicas", fue creado por Santana inspirado en la labor desarrollada en el observatorio A.L.M.A. en el desierto de Atacama. En particular representa un reconocimiento a la importante labor científica que se realiza en Chile en la investigación y estudio del cosmos. "Me interesé por la astronomía, por unir el arte y la ciencia, para también hacer tomar conciencia de las cualidades que tenemos en este país para la astronomía (...) Es una cuestión de mirar hacia arriba y ver de dónde venimos y hacia dónde vamos", comenta el artista.

Para la obra "Big-Bang", Lukax y sus compañeros de elenco (una bailarina y una profesora de educación básica de manera estable y cuatro invitados) visten con overoles blancos, simulando trajes espaciales. En la puesta en escena existe una estructura hecha con tubos de PVC, que es un cubo de tres metros con resortes y tarros, con botellas, vasos y juguetes a su alrededor. Con esa particular instalación el artista busca que "el oyente, quien esté ahí, sienta el sonido (...) Se busca que la persona se inmerse en el sonido, lo que se llama una escucha profunda, es la búsqueda concreta de encontrar sonidos, y que esos sonidos revelen algo más que el mero objeto", detalla.

Toda la puesta en escena llama la atención por sus colores, variedad de elementos y sonidos. Aquella mezcla, en ocasiones enigmática, envuelve al público en un viaje onírico al cual que difícil resistirse. Y, ¿para qué rechazarlo? El espacio sideral está a la mano con Lukax.

vALIOSOS oBjetos

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Este artista viñamarino tiene una verdadera devoción por los objetos de uso cotidiano, y prueba de ello, son las más de tres décadas que lleva usándolos para hacer arte. En particular, con "Lúcuma_Estación Receptora de Ondas Sónicas Cósmicas", quiere hacer notar que cualquier persona puede convertirse en improvisador y lograr sonidos inimaginables con elementos a su alcance, sin la necesidad de ser músicos.