Prisión preventiva para parapetado
Carlos Toledo disparó en contra de carabineros. Su pareja atribuyó actual situación a "envidia" de vecinos.
Yeimi Contreras no niega que junto a su pareja, Carlos Cristian Toledo Muñoz, tuvieran problemas de convivencia y que los episodios de violencia intrafamiliar entre ellos hayan sido frecuentes. Sin embargo, descarta categóricamente que el viernes 2 de agosto, día en que carabineros de la Tenencia Nueva Aurora, acompañados por efectivos del Gope, llegaron hasta su domicilio para detener a su pareja, el hombre haya estado en la vivienda.
"Estamos separados, puede que haya estado cerca, pero no estaba en la casa. No digo que no hayan existido los problemas de convivencia, pero esta es pura envidia de los vecinos", dijo tras la audiencia.
Parapetado
La historia posterior ya es conocida: ante el llamado de los efectivos, el hombre reaccionó de manera airada, profiriendo improperios contra carabineros y efectuando dos disparos al aire. Tras esto escapó, siendo detenido el martes y puesto ayer a disposición del tribunal viñamarino.
Pese a su negativa y a la del defensor penal Cristian Sandoval, el magistrado Erik Espinoza resolvió decretar su prisión preventiva, aunque estableció una caución de 400 mil pesos, garantía que, de ser cancelada por el imputado, le permitirá recuperar su libertad.
Carlos Toledo Muñoz fue detenido por carabineros de la Sección de Investigación Policial, SIP de la Primera Comisaría y del OS7 luego que el viernes 2 de agosto se parapetara en su vivienda y efectuara disparos y amenazas en contra del personal policial que pretendía aprehenderlo.
Ayer, durante la audiencia de formalización, el fiscal Juan Sebastián de la Fuente formalizó cargos en su contra por los siguientes delitos: amenazas en contra de un vecino el pasado 14 de julio, lesiones en contra del mismo vecino a quien le dispara en dos oportunidades el mismo 2 de agosto, porte ilegal de arma de fuego y amenazas de muerte contra carabineros.
La audiencia de formalización se efectuaba en la sala 1 a cargo de la magistrado María del Pilar Labarca, quien se inhabilitó de continuar con la causa por tratarse de una investigación que involucraba a carabineros, institución para la cual la magistrado presta servicios como docente en el Grupo de Formación.
A raíz de lo anterior, la causa se trasladó a la Sala 2 donde el juez Espinoza procedió a fijar la cautelar de prisión preventiva y un plazo de investigación de 80 días.