El tiempo y los recursos dilatan al tercer refuerzo de Wanderers
Los verdes quieren sumar un tercer nombre a sus filas, pero el panorama no se vislumbra para nada sencillo.
No hay peor ciego que el que no quiere ver, y hoy, desconocer el preocupante presente de Santiago Wanderers, bordea en lo irrisorio. Los verdes son el equipo con el peor rendimiento de lo que va de segunda rueda, acumulando apenas dos puntos en cuatro duelos jugados, resultados que hoy los tienen fuera de la zona de liguilla de ascenso, por lo que amarrar un tercer refuerzo parece algo lógico. Lastimosamente, dicha gestión, se ha dilatado mucho más de lo que la dirigencia, cuerpo técnico e hinchas caturros esperan.
Según lo estipulan las bases del torneo nacional de Primera B, los clubes del ascenso tienen hasta el día hábil anterior de la vigésima jornada para inscribir a las tres incorporaciones que el reglamento les permite sumar. Dicho plazo fatal, se cumplirá este viernes a las 18.00 horas, por lo que en los siguientes días, debería haber novedades en materia de refuerzos para los caturros, ya sea confirmando un nombre, o bien dando las razones sobre el por qué se decidió no seguir reforzando al plantel. Hoy, pasado el mediodía, Miguel Ramírez dará una conferencia de prensa en la que seguramente se referirá a este tema.
Hay reuniones
Según se pudo indagar, las intenciones de los verdes por traer un nuevo jugador son totales, sin embargo, estos deseos no son tan fáciles de poder plasmar en la realidad. Miguel Ramírez se ha reunido con Rafael González y Jaime Pizarro, presidente y gerente deportivo del club, respectivamente, durante los días lunes y martes, instancias en las que además de dar sus excusas respecto al bajo nivel mostrado por el equipo en el inicio de la segunda rueda, el "Cheíto" habría pedido un esfuerzo por parte de la dirigencia para poder sumar un nuevo nombre en sus filas, más aún sabiendo que Luis Valenzuela seguirá en el equipo pero no será considerado dentro de las citaciones debido al acto de indisciplina que protagonizó hace unas semanas.
Más allá de las buenas intenciones que puedan tener tanto González como Pizarro, hay un importante tema que traba, en primera instancia, todo tipo de negociaciones con un potencial refuerzo, y es que las arcas económicas del club no se encuentran en la mejor de las condiciones. Es más, según revela una fuente al interior del equipo, el gasto realizado en los arribos de Matías Campos y Néstor Canelón ya fue bastante grande, y por lo mismo no se ve por dónde se puedan sacar recursos para negociar con un tercer futbolista. González Camus, en reiteradas ocasiones, ha dejado abierta la chance de sumar un nuevo jugador en caso de que Miguel Ramírez así lo solicite.
Como si lo anterior fuese poco, los porteños deben lidiar además con un mercado muy acotado. Por reglamento, no pueden incorporar a un jugador de Primera B que haya disputado una mínima cantidad de minutos, por lo que deben mirar hacia la Primera División para poder concretar un potencial fichaje. El Decano además tiene llenos sus cupos de extranjero, por lo que el abanico de posibilidades es bastante reducido, razón por la que no se descarta que el plantel se quede tal y como está, y sean finalmente estos mismos hombres quienes deban lidiar con la presión del objetivo que ellos mismos se autoimpusieron: ganar el campeonato y conseguir los boletos directos de vuelta a la Primera División de nuestro fútbol.