Estimada Directora:

Respecto al cambio de hora, es lo más dañino para todo ser humano que hagan estos cambios en nuestro país.

Con respeto, pero muy molesta, le pregunto a las máximas

Autoridades: ¿Gobiernan para mejorar el bienestar de todos los chilenos, o para enfermarnos y favorecer a los grandes empresarios? Tontos no somos; que nos hagamos es otro cuento.

Con el cambio de hora, biológicamente y físicamente todo ser humano se afecta. Vivimos más apurados, muchos tratamientos y remedios se alteran y existen más gastos en general.

Lo que más se favorecen con este cambio, son los empresarios de Chilquinta, y es para la risa, ya que en la madrugada para ir al colegio y al trabajo encendemos las luces y en la noche se llega del trabajo y colegio a encender las luces.

En el día no se ocupan las luces. Quienes se favorecen una vez más, los grandes empresarios en general.

Autoridades de Chile: hasta cuándo nos faltan el respeto, viviendo de esta manera. Valparaíso en su mayoría está compuesto adultos mayores. Se requiere vivir tranquilos, sin apuro, y cuidar nuestra salud. Nos preguntamos, hasta cuándo vamos a vivir con tanto engaño y mentiras. Las pensiones miserables, los remedios por las nubes, la delincuencia en cada esquina las promesas no se cumplen.

Aida Capurro

El resurgir de la polémica del "pan batido" o "marraqueta" nos recuerda que la centralización también es cultural, imponiendo una forma de ver el mundo que muchas veces puede parecer totalitaria.

La historia sobre este sabroso pan, creo que ahí no hay debate, se remonta a Valparaíso cuando los hermanos Marraquet instalan su panadería y venden una variante del Baguett, hecho accidental, que da origen al "pan batido".

Tras su traslado a Santiago los populares panaderos siguieron su fama, siendo masificó el "pan batido" como "el pan de los hermanos Marraquet", cosa que fue popularizada en dicha ciudad como "marraqueta".

Su masificación a otras zonas, como el sur de Chile, simplemente la receta fue nombrada como "pan francés", replicando el éxito inicial que se ha ganado un espacio en nuestras mesas.

Es por lo tanto necesario hacer prevalecer la denominación de origen pero también reconocer la cultura local, la cual ha generado identidad tan importante en diferentes regiones de nuestro país.

"Paladines del pan Batido" como el historiador Francisco Sánchez y "vocero" Andres Permontti nos dan luces que esta es una polémica de larga data, que debe ser vista desde una perspectiva de descentralización y sobre todo recordando en esencia la identidad local, al fin y al cabo lo claro es que nos une en la mesa.

Falta de control

"Los automovilistas particulares y los conductores de buses, se ríen de las normas del tránsito en las ciudades, la que indica claramente que no debe sobrepasar de los 50-60 km/hora. Si de control serio se tratara, las municipalidades, con los partes de carabineros acusando esta infracción, se harían ricas en dinero destinado para tapar los hoyos de las calles. La falta de control por parte de la fuerza pública, el no existir aparatos automáticos en las calles de más tránsito, que acusen a los infractores y dejen constancia de la patente por la falta cometida, hace que los alevosos continúen cometiendo estas faltas, provocando cada vez más accidentes contra los peatones, los que ni siquiera se atreven ya, a cruzar por las señales de cebra, las que sólo muy pocos conductores las respetan."

Hugo Ramos

Círculo Acton Chile

Renato Norero