Sección Deportes

En una noche en la que Néstor Canelón puso la fiesta, apareció Lionel Altamirano para poner la guinda a la torta. El delantero argentino fue el encargado de anotar la cuarta cifra en la goleada de 4-1 que Wanderers le propinó a Deportes La Serena el fin de semana, triunfo que sirvió no solo para que los verdes volvieran a ubicarse en la cima del torneo, sino también para volver a encender los ánimos de un camarín que necesitaba reencontrarse con el triunfo.

"Todos acá trabajamos de la misma manera. En la derrota el grupo se une cada vez más y la verdad es que nos dolió mucho la semana que sufrimos después de perder en el Estadio Nacional, pero lo bueno es que el grupo se unió, siguió trabajando al cien, y ante La Serena eso quedó demostrado. Ellos fueron un equipo que se vino a meter atrás y los superamos en todo momento", fueron las palabras con las que Altamirano describió el sentir de sus compañeros tras los complicados días que pasaron luego de caer ante el Morning.

Dado lo irregular del campeonato, la victoria ante los granate le sirvió al Decano para volver a quedar puntero, y como goles son amores, la sensación del delantero argentino que llegó a principios de temporada fue todavía más satisfactoria luego de volver a encontrarse con las redes. "Lo estaba esperando, lo necesitaba, uno siempre trabaja para esto, todos mis compañeros me felicitaron porque saben que entreno siempre al cien. Los ayudo, cuando me toca estar afuera le doy una mano a todos, los apoyo a todos. Uno antes de ser jugador tiene que ser persona y estoy contento porque me felicitaron todos tras el gol", sostuvo el exartillero de Estudiantes de Caseros.

Sin descanso

El cuadro porteño no volverá al ruedo oficial hasta el próximo lunes 30 de septiembre, cuando reciba a Barnechea en el estadio Elías Figueroa de Playa Ancha. Pese a ello y a las venideras Fiestas Patrias, el "18" verde confirmó que el plantel tendrá entrenamientos durante todos los días, olvidándose de poder descansar una jornada pese a no tener competencia. "Así nos lo dijo el técnico, no vamos a tener nada de días libres, así que tenemos que seguir trabajando y meterle", confirmó el oriundo de Laguna Paiva.

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Sin lugar a dudas, Charles Aránguiz se ha convertido en un referente dentro de la Selección. Dos títulos de Copa América a su haber, además de grandes participaciones en el Mundial de Brasil, avalan al "Príncipe" como una voz autorizada dentro de la Roja.

Por lo mismo, y ante la ausencia del actual capitán del combinado nacional, Gary Medel, se creía que el jugador del Bayern Leverkusen podía llevar la jineta en los últimos dos duelos amistosos de Chile, ante Argentina y Honduras.

Pues pese a la nominación de Claudio Bravo, la intención de Reinaldo Rueda era darle la capitanía al exjugador de Internacional de Porto Alegre. No obstante, pese a la voluntad del cafetero, Aránguiz rechazó el ofrecimiento.

Según comentó a CDF, la razón fue que "a mí me criaron de otra forma. Claudio estaba ahí y no quise aceptar la capitanía por respeto a él".

Pese a ese respeto, el "Príncipe" reconoció que la situación con el guardameta es extraña. "Es raro todo lo que ha pasado. El ambiente está raro. Todo error trae consecuencias. Es difícil mirar a Claudio como se le miraba antes (...) Los errores traen consecuencias. En este caso, de alguien ajeno a él … Hoy, nuestro capitán es Gary. Pero cuando estemos todos y Claudio sienta que es el momento, tenemos que conversar. Si no, seguiremos esperando que él se sienta cómodo", sostuvo.

Finalmente, respecto una posible "timidez" como razón para rechazar la jineta, indicó: "Se habla de timidez, de miedo, me da risa que se digan esas cosas. ¿Miedo? Vivo hace 30 años en mi población con mi vieja. ¿Miedo a qué?".