Nicolás Arancibia Bórquez
No cabe duda de que el gran boom del fútbol femenino es una fuerza que llegó para quedarse, la cual además sirvió para impulsar a gran parte de los clubes nacionales para que, de una vez por todas, comenzaran a tomar en serio esta rama del fútbol. Por lo mismo es que Santiago Wanderers no se quiso quedar atrás, y tras varios meses de trabajo, consiguió convertirse en el noveno elenco nacional que obtiene la licencia de clubes femenino por parte de la ANFP.
Según cuenta Constanza Minoletti, subgerente del fútbol nacional femenino, la licencia de clubes consiste en "un proyecto que hemos estado trabajando con FIFA desde el año 2018. En esta etapa, solamente dos países en el mundo la están desarrollando, Islandia y Chile, por lo que es un tremendo orgullo para nosotros estar en este trabajo. La idea es que a través del cumplimiento de ciertos estándares jurídicos de infraestructura, financieros y deportivos, los clubes puedan licenciarse y obtener un sello que los distinga de las demás instituciones y participar con ello en nuestros campeonatos ANFP femeninos".
Junto con recibir el sello por parte del ente rector del fútbol chileno, a los verdes además se les entregaron cajas de indumentaria que incluye zapatos, canilleras, balones y todo lo adecuado para poder llevar a cabo los entrenamientos con normalidad.
Respecto a parte de los criterios que la ANFP solicitó al Decano para poder entregarle la licencia, destacan que su cuadro femenino debe jugar en un recinto que tenga capacidad de al menos 250 espectadores sentados, y el cual cuente además con baños públicos y al menos tres camarines. También que la institución ponga a disposición de sus jugadoras un lugar apto para entrenamiento al menos tres veces por semana, que se tenga una categoría adulta y una juvenil, y además que sean entrenadas por técnicos titulados.