Nos guste o no la denominada Crisis Hídrica es un tema que desde principios de los años 80 se ha venido planteando, generando discusiones y también la elaboración de estudios trascendentes.
De las proyecciones establecidas muchas se han cumplido, incorporándose nuevas tecnologías pero en general aún no tomando medidas generalizadas.
En países donde se ha tenido que apostar por la "generación de agua" y establecimientos de "vergeles en el desierto", en una forma literal y no tan solo metafórica, ha existido políticas públicas claras, además de la generación de innovación y estudios a largo plazo.
Los resultados son claros y exitosos, generando una industria de vanguardia en donde nuestro país puede aprender en forma extraordinaria, a veces es necesario ver no tan solo ver a los referentes en los temas, hay que preguntarles cómo llegaron ahí y de une manera podemos aprender de sus lecciones aprendidas, más aún cuando diversos convenios se han firmado con Israel y protocolos establecidos esperan ser activados.
Una adrenalínica experiencia
¿Qué podríamos esperar del seguro debate que se vendrá por el valor del nuevo Sueldo Mínimo, cuando en él participan personas como parlamentarios, ministros, expertos asesores en finanzas, empresarios, que digamos la verdad, nunca han tenido la "adrenalínica experiencia" de vivir un mes solo con un poco más de $ 200.000, con familia, gastos de educación, salud, locomoción, alimentación y quién sabe cuántas otras obligaciones, pero lo mejor de todo, es que se desgastarán en "dimes y diretes" y qué dijo el otro, por dar ó no dar como en años anteriores algo cercano a 6.700 pesos de aumento, cuando este valor por ejemplo, correspondería en el caso de un senador aproximadamente al 0,11% de su dieta menos impuestos, salud y previsión, ó dicho de otra forma lo que gastaría en un estacionamiento ó en dulces de Curacaví para hacer más agradable su viaje al Congreso?
Francisco Sánchez
Luis Enrique Soler Milla.