Escalera Pasteur sigue clausurada tras derrumbe
A dos meses de la tragedia, la actividad comercial retornó a la normalidad.
Marcela Guajardo Pérez - La Estrella de Valparaíso
Hay una larga fila para el ascensor Espíritu Santo. A pesar que la mayoría de los residentes del cerro Bellavista utiliza este medio de transporte, igual echan de menos la escalera Pasteur, que quedó clausurada después de la tragedia que ocasionó el derrumbe del 13 de agosto pasado.
"Yo uso más el ascensor, pero utilizaba la escalera para bajar al plan. Ahora tengo que usar la escalera de Héctor Calvo que está más lejos", dice Ana Robledo.
Los vecinos comentan que la escalera Pasteur es una de las más extensas y por eso, muchos evitan utilizarla. Los turistas son los que más la ocupan para llegar al Museo de Cielo Abierto.
Muchos porteños están acostumbrados a las escaleras, pero los adultos mayores agradecen la presencia del ascensor, que les permite llegar a su destino a un cómodo precio de 100 pesos y así evitar la locomoción colectiva.
Quienes sí utilizaban la escalera Pasteur, pero no para subir o bajar del cerro eran adolescentes, tal como el grupo de amigos que se reunió a carretear ese fatídico martes 13.
Comercio
Después del accidente, los comerciantes de Huito se enfrentaron a varias semanas de bajas ventas. La mayoría de los clientes se mantuvieron alejados por los trabajos de despeje, mientras que otros llegaban solamente a mirar los restos del derrumbe.
"Estuvimos sin funcionar como una semana, así que igual nos vimos afectados económicamente. Como la gente no se acercaba, empezamos a trabajar más en el reparto", dice María José Páez, quien trabaja en SushiRed. "Antes se veían hartos jóvenes que se juntaban en la escalera, pero ahora bajó la afluencia en el sector", agrega.
"Que la escalera esté clausurada no me afecta, la gente que viene de la calle principal pasa por acá, como las que toman el ascensor. La verdad es que acá ya se normalizó. Los clientes fueron super prudentes porque esperaron a que la situación volviera a la normalidad, pero de todas maneras eso afectó las ventas", dice Marcela Díaz, de "De la Tierra", tienda de productos naturales.
Demoliciones
Si bien el sector de Aldunate y Huito ya está despejado de escombros, este accidente reactivó la necesidad de avanzar con las demoliciones de otras viviendas que están en peligro.
En Valparaíso habría una gran cantidad de estructuras que necesitan ser destruidas por peligro de derrumbe.
"Las demoliciones están avanzando, las licitaciones están en curso, el ministro Monckeberg comprometió mil millones de pesos y estamos buscando los mecanismos institucionales para contar con esos recursos lo antes posible. Ahora, las demoliciones se van a hacer igual, contemos o no con los recursos del Minvu en esta materia", dijo Jorge Sharp, alcalde de Valparaíso.