Miguel Ojeda salió de su casa la noche del viernes en rumbo a Pedro Montt, a eso de las 11.30 horas para comprar. Mientras esperaba locomoción colectiva a las afueras de la Escuela Alemania en la Avenida Argentina, cinco hombres lo abordaron para robarle de forma violenta.

Los antisociales no sólo le quitaron los $20.000 que le quedaban y su billetera, sino que también lo golpearon hasta dejarlo en el suelo, inconsciente.

La víctima, no recibió ningún tipo de ayuda, por lo que tuvo que movilizarse solo hacia su hogar completamente ensangrentado.

Con una manopla

Junto a su esposa, Elizabeth Garzón aseguran que el hecho se relacionaría con xenofobia, ya que ambos son extranjeros. "Pasaron cinco sujetos y uno de ellos le pidió plata, empezaron a revisarlo y cuando él intenta quitarse, empezaron a golpearlo. Recibió golpes en todo su rostro, y uno de los golpes más fuerte fue en la barbilla, le tumbaron los dientes, porque utilizaron una manopla. Y mientras le pegaban patadas, le decían váyase de aquí extranjero, ándate de Chile, devuélvete a tu país", cuenta Elizabeth.

Tras la golpiza, la pareja se dirigió hasta el Hospital Carlos Van Buren, donde tuvieron que esperar cerca de 10 horas para ingresar a un box. En el lugar, recibió la atención que requerían, aunque aseguran que el trato no fue el mejor.

"Estaba irreconocible, con sus ojos morados, labios y pómulos dañados, tuvieron que sacarle un diente y tiene fractura mandibular. En el hospital además, tuvimos una mala experiencia y pusimos una queja en la Municipalidad, porque vimos vulnerados nuestros derechos", señala Elizabeth.

Cuatro días

Luego de estar tres meses cesante, Miguel Ojeda, de origen venezolano, había encontrado trabajo en Concón, por lo que esta situación pone en riesgo su estabilidad laboral.

"Encontró trabajo en la construcción hace muy poco y nos preocupa también aquello. No queremos que nadie más viva una situación así y esperamos que nunca más se vuelva a repetir un hecho tan violento como este", manifiesta la esposa de Miguel.

Matías Valenzuela

El impacto era evidente en las caras de los vecinos de la calle General Sucre. Les fue imposible quedar indiferentes ante lo violento del ataque que afectó a uno de los residentes.

Al lado de la cancha "La Campana", se desarrolló el incidente. Un grupo indeterminado de sujetos descargó su armamento contra un pequeño negocio de una curva, hiriendo al propietario, y escapando del lugar.

Testigos afirmaron que eran por lo menos diez personas, a bordo de tres camionetas que llegaron con armamento de grueso calibre para disparar contra el local. Uno de ellos habría llevado puesto un chaleco antibalas.

El pasaje es bastante estrecho, por lo que todas las casas aledañas escucharon los estruendos, y hubo algunos adultos mayores que se tiraron al suelo atemorizados por los balazos.

Los proyectiles eran prácticamente incontables: en la puerta, las rejas, el techo; en todo el frontis del local había impactos de bala.

El locatario, identificado como G.B.F., de 60 años, fue herido en sus piernas por dos disparos, y fue derivado al hospital Van Buren para recibir atención, pero afortunadamente no tiene riesgo vital.

¿asalto?

El operativo fue instruido por el fiscal de turno a Labocar y OS-9 de Carabineros. El teniente Juan Delgado Espinoza, de Labocar Valparaíso, manifestó que el hecho se dio alrededor de las 14.30 horas.

Por las características del ataque, no hay claridad de si se trató de un asalto o un ajuste de cuentas. El teniente Delgado manifestó que eso "forma parte de la investigación".

Sobre las pericias, detalló que "fue una diversa cantidad de disparos y diversos calibres, verificando que hay bastante evidencia balística".

Asimismo, precisó que la víctima intentó defenderse de sus atacantes. "El dueño mantenía un arma inscrita con la cual pudo repeler este ataque", explicó.