Fue una acción espontánea surgida entre los residentes y no una convocatoria de la agrupación de juntas de vecinos de Reñaca como aclaró su presidenta Viviana Collado quien precisó "confiamos nuestra seguridad a carabineros".

La posibilidad de que manifestantes provenientes de Viña llegaran al popular balneario de la Ciudad Jardín hizo que cerca de una centena de personas ataviadas con chalecos amarillos, esperaran provistas con bates de beisbol, palos de golf, de hockey y criquet en el puente de Reñaca.

A diferencia de lo que ocurría en el plan de la ciudad, en este lugar el jefe de la Cuarta Comisaría de Concón, llegó personalmente a hablar con los manifestantes, dándoles la tranquilidad que la marcha convocada no logró su propósito y se encontraba "controlada", dialogando con ellos y agradeciendo que los residentes apoyaran a su comunidad. Asimismo les detalló el plan de monitoreo en Reñaca y Concón a fin de garantizar seguridad a sus residentes.

"Me mantengo acá en el sector de Reñaca y Concón con aproximadamente 50 carabineros para el control del orden públicos. Estén tranquilos y no hay ninguna situación de riesgo para ustedes y si la hubiese vamos a estar acá nosotros para poder apoyarlos y hacerle frente a lo que hay que hacer", manifestó el mayor Francisco Villablanca.

Priscilla Barrera Ll.

Con saqueos en una farmacia de la Av. Libertad, más de una decena de detenidos y una cifra similar de heridos con balines de goma disparados por carabineros se desarrollaba ayer, hasta el cierre de esta edición, la marcha que pretendía llegar hasta Reñaca y Bosques de Montemar pero que se vio enfrentada a una verdadera "muralla" policial que incluso impidió que pudieran salir del centro de Viña, logrando sólo pequeños grupos disgregados avanzar por la Av. Libertad.

La convocatoria efectuada por redes sociales y denominada "Viña no duerme" tuvo respuesta inmediata: tanto de quienes acogieron el llamado y que comenzaron a reunirse cerca de las 14.00 horas en la Plaza Vergara como en Reñaca, donde vecinos ataviados con chalecos amarillos respondieron al llamado hecho por redes sociales y denominado "Protejamos nuestro barrio". (ver nota secundaria)

No pasaron

Antes que pudieran siquiera avanzar, los manifestantes congregados en la Plaza Vergara vieron frustrado su objetivo de avanzar hacia Reñaca.

No eran todavía las 15.00 horas, cuando un amplio contingente policial - carros lanzaaguas, lanzagases y 14 motos todo terreno además de furgones policiales - se ubicaron en puntos estratégicos, custodiando el puente Libertad que momentáneamente vio suspendido el tránsito vehicular y rodeando la plaza Vergara.

Los disturbios no se hicieron esperar. Los deseos de los manifestantes por avanzar fueron repelidos rápidamente por los efectivos policiales. Sin diálogo ni advertencia previa, comenzaron los enfrentamientos.

El fuerte chorro de agua fue acompañado de gases lacrimógenos y disparos de perdigones de goma que, pese a los protocolos, fueron directo a los cuerpos de manifestantes: más de una decena resultó herido en pies, glúteos y espalda. La cifra se suma a la cerca de treintena de personas heridas durante los disturbios del lunes, situación denunciada por la concejala viñamarina Marcela Varas, quien junto con lamentar los daños al comercio sostuvo que "nada justifica el uso excesivo de la fuerza".