Priscilla Barrera Ll.
Fue el tema del día entre los funcionarios de la Municipalidad de Viña del Mar. Los votos en contra de los concejales Marcela Varas (PPD) y Víctor Andaur (PC) y la abstención del RN, Rodrigo Kopaitic - Gabriel Mendoza no asistió - impidieron que se aprobara de manera unánime la nueva planta municipal, situación que generó diversas reacciones de rechazo.
Las mismas que se harían plausibles hoy, a partir de las 10.00 horas, cuando los gremios realicen una protesta en contra de quienes impidieron que, tras 25 años, se renovara la planta.
La primera en lamentar lo ocurrido fue la alcaldesa Virginia Reginato, quien recordó que desde el año 1994 que la planta municipal de Viña del Mar se encuentra congelada.
"Lamento profundamente el rechazo por dos concejales, Víctor Andaur y Marcela Varas de la nueva planta municipal para Viña del Mar que moderniza la actual que se encuentra congelada desde hace 25 años (...) Durante más de un año y medio la Municipalidad de Viña del Mar trabajó y presentó al Concejo Municipal una nueva estructura orgánica para enfrentar las, cada vez mayores, exigencias de una ciudad de más de 340 mil habitantes y de un municipio que día a día asume más y mayores funciones para atender a la ciudadanía", dijo la jefa comunal a través de un comunicado.
En el mismo documento, la alcaldesa recordó que desde el 15 de junio del 2018, a través de un comité integrado por representantes de la administración municipal y por todas las asociaciones de los funcionarios, se trabajó en forma permanente para consensuar una propuesta de nueva planta municipal que cumpliera con el propósito esencial de servir a la comunidad.
"Esta propuesta fue presentada al Concejo Municipal el 30 de septiembre, explicada y analizada profundamente en 5 comisiones por más de un mes y medio, periodo muy superior al establecido por la ley", señaló la alcaldesa Reginato, a través de un comunicado.
Argumentos
Pese a la información de la alcaldesa en torno al trabajo desarrollado e informado a los ediles, los concejales que se opusieron a la propuesta coincidieron en señalar dos razones para sostener su posición: el tema presupuestario y lo que catalogaron como poca claridad del proceso.
La concejala Marcela Varas expresó que desde que recibió los antecedentes relativos a la propuesta le surgieron dudas respecto de su financiamiento y los alcances legales que tendría aprobar una planta que pudiera estar desfinanciada, incumpliendo con ello lo que establece la ley.
"Pedí antecedentes los que al día de hoy (ayer) no me fueron entregados. Es más hoy a las 11.15 horas se nos entregaron los últimos antecedentes cuando el Concejo estaba citado para iniciar a las 11 horas. Esta no es la forma. Por tales razones y queriendo dar cumplimiento de mis obligaciones legales se me hizo imposible aprobarla debido a que podría haber profundizado el déficit de este municipio que sabemos ha afectado a los sectores menos favorecidos de nuestra ciudad, agudizando además el malestar de las justas reivindicaciones por las que muchos vecinos y vecinas de nuestra ciudad se han estado manifestando en el último tiempo", señaló Varas.
En el mismo sentido se manifestó el concejal Andaur, quien calificó de incompleta la información proporcionada previo a la votación y las dudas en torno al financiamiento de la nueva planta.
"Dado el cuadro financiero del municipio era lógico que nos preocupara lo que significa la nueva planta. Eso debía aclararse y los recursos que permitirán su financiamiento", precisó el concejal del PC.
En el mismo sentido, Andaur se hizo cargo de los cuestionamientos expresados por algunos funcionarios en torno al mecanismo que les permitía aspirar a la nueva planta.
"Nunca tuvimos la ocasión de discutirlo y aclararlo abiertamente con los dirigentes (de los gremios). Nos interesaba conocer la posición de los gremios y eso provocó dificultades", sostuvo el edil.
7 votos a favor, 2 en contra y 1 abstención fue el resultado que impidió avanzar en la renovación de la planta.