El complicado momento de Taylor Swift previo a un importante premio
C.C.
Este domingo Taylor Swift recibirá, de manos de la legendaria Carole King, el premio Artista de la década en los American Music Awards (AMAs). Un reconocimiento a su extensa carrera que se ha visto empañado por una disputa legal.
El show en la gala de la dueña de hits como "Shake It Off" y "Bad Blood" -en el que trascendió que planeaba cantar un medley con sus éxitos- quedó en duda el 14 de noviembre, cuando la propia Swift denunció que le habían prohibido interpretar sus temas en la ceremonia.
La polémica
El conflicto se remonta a los inicios de Swift, reclutada a los 14 años por Scott Borchetta -fundador del sello Big Machine Records- con el que la estrella tuvo contrato hasta noviembre de 2018, cuando firmó con Universal Music Group.
En ese cambio de casa discográfica, la artista perdió los derechos de sus seis discos previos. Ahí está el problema: en junio Scooter Braun, manager de artistas como Justin Bieber y Ariana Grande, compró Big Machine Records, por US$300 millones, quedándose con el catálogo de Swift.
Ella acusó que no le dieron la opción de comprar su propia música y que le prohibieron tocar sus temas antiguos hasta noviembre de 2020. Por eso, la artista anunció que en esa fecha grabaría de nuevo todo lo que editó antes de "Lover" (2019), su más reciente disco bajo Universal.
El conflicto legal estalló el 14 de noviembre, cuando Swift denunció que Braun y Borchetta le habían prohibido tocar sus hits antiguos en los AMAs, porque lo consideraban una grabación, y también reproducirlos en un documental que Netflix prepara sobre ella. Sin embargo, Big Machine Label Group niega esas acusaciones, por lo que se espera que Swift sí pueda tocar sus éxitos este domingo en los premios que transmitirá TNT a las 22.00 horas.