El consumo de productos procesados comienza a incrementar en esta época por diversas actividades que se toman el fin de año. De hecho, la ingesta per cápita de elaborados alcanzó los 16 kilos anuales en promedio. Y si bien tiende a haber cierto resquemor por aquellos alimentos que poseen los sellos negros, desde la Organización Interprofesional Agroalimentaria del Porcino de Capa Blanca de España, instamos a los amantes de la buena mesa a disfrutar con prudencia de aquellos clásicos como el jamón serrano y el chorizo español. No se trata de hacer un llamado a incrementar desmedidamente la ingesta de procesados, pero sí a disfrutar de estándares europeos y bienestar animal con los niveles más altos de calidad y sabor.

Estado de emergencia

Al observar los últimos acontecimientos de saqueos, robos, destrozos, incendios, etcétera, y que dejan a miles de chilenos del pueblo sin trabajo, provocando un drama familiar, el intendente de nuestra región de Valparaíso debiera impetrar al presidente el estado de emergencia, porque así como vamos la región va a quedar destruida y Carabineros, como está sobrepasado con creces, no puede controlar la situación. Esto se ve en las calles, los cobardes en grupo saquean, incendian a vista de todos... No deje pasar más tiempo, solicite ahora, mañana es tarde.

Ley de la selva

¿Tiene que ver con la mano blanda que ha mostrado el municipio que ahora permitan estacionar en cualquier parte sin ninguna fiscalización ni respeto por las señaléticas?

Las calles Sotomayor (incluyendo la misma plaza), Tomás Ramos, Prat (afuera de los bancos y hasta el Registro Civil), Condell, Esmeralda, etcétera, están llenas de autos desde temprano en la mañana, nadie fiscaliza, nadie cobra y generan aún más congestión vehicular de la que hay en el sector habitualmente. Parece la ley de la selva, ¿podrían averiguar qué ocurre, por favor?

Alberto Herranz,

director de INTERPORC

Julio López

Cristhián Osorio

Señores parlamentarios de nuestro Congreso, ¿ustedes aprobarían a su plena satisfacción que personas, sin antes haberlas previamente analizado profundamente para certificar que cuentan con los méritos personales, laborales y profesionales, en la teoría y en la práctica, más que suficientes, para hacerse cargo de la administración de sus finanzas personales? Digamos, por ejemplo, de sus oficinas parlamentarias, en la forma y en el fondo. Entonces, ¿por qué siguen manteniendo requisitos tan paupérrimos, como solo ser chileno(a), tener cuatro eedio y respirar para que personas con esta preparación tan desmedrada puedan llegar a ser alcaldes, cores y gobernadores regionales para administrar debidamente las finanzas de los cientos y cientos de municipios y de las 16 regiones a lo largo de Chile, respectivamente?

Luis Enrique Soler Milla