Marcela Guajardo Pérez

Como una herramienta valiosa para ejercitar procesos democráticos de participación, calificaron expertos la consulta ciudadana que se realizó la semana pasada en 22 comunas de la región de Valparaíso y a nivel nacional.

Un acto inédito que incluyó votación online, participación de menores de 18 años y que en algunas comunas del país se contabilizaran más votos en elecciones pasadas.

"Me pareció un proceso interesante. De los más de dos millones de personas, casi un 1,8 de ellos lo hicieron a través del sistema de voto electrónico y eso es muy fuerte en las personas más jóvenes que son nativos digitales", afirma Eduardo Araya, académico del Instituto de Historia de la PUCV.

La gestión de la Asociación Chilena de Municipalidades también es valorada por los analistas.

"Deberíamos celebrar la capacidad que han tenido los municipios que acordaron las consultas y que se ha traducido en estos dos millones de votos, que dan mucho que pensar y que habla muy bien de lo insistentes que han sido los alcaldes al realizar esta consulta", dice Félix Aguirre, profesor titular de al Escuela de Sociología de la Universidad de Valparaíso.

"Las municipalidades unas más, unas menos, han estado activas todo este proceso. El mismo alcalde Codina (presidente de la ACHM) es de gobierno y él ha sido el mejor representante de que las municipalidades tienen mucho que aportar. Generaron cabildos, se adelantaron al gobierno en todo y esto, que pensábamos que iba a morir con la nueva Constitución, como acción terminó tomando fuerza, adquiriendo un nuevo aire y la gente participó de manera activa", asegura Felipe Vergara, académico de la Universidad Andrés Bello.

Preguntas

Pero el proceso no estuvo exento de problemas.

"Hay que tener un poco de cuidado en los procedimientos. El hecho de que el Servel no haya querido entregar información es decidor, porque nos pone a todos entre dicho. Para que una elección tenga visas de ser legal y tengamos todas las garantías, tiene que haber un órgano competente que dé cuenta de los resultados y eso lamentablemente no se ha cumplido", explica Aguirre.

Además de no facilitar el padrón electoral, la consulta ciudadana tuvo problemas con el sistema electrónico y algunas comunas tuvieron que extender el plazo para votar.

"Hay una cierta resistencia en avanzar en ese tipo de cosas, porque significan costos. Pero es un tema que se puede ir instalando y que puede ampliar la participación, particularmente en los plebiscitos locales", sugiere el profesor Eduardo Araya, quien partició en una investigación sobre el e-voting en el año 2007.

Expertos criticaron algunas de las preguntas que se incluyeron en la consulta y que no tenían relación con el proceso constituyente.

"Lo lamentable es que hubo algunas municipalidades que optaron por hacer encuestas que no tienen que ver con lo que se está analizando, como las municipalidades del barrio alto de Santiago que hicieron una encuesta relacionada a la seguridad. También era importante saber qué pensaba la gente que tiene mayor poder adquisitivo sobre las demandas sociales y ahí se perdió una oportunidad", dice Felipe Vergara de la UNAB.

"No sé qué interés puede tener para un ciudadano de Viña del Mar el futuro de las victorias. Creo que no era un tema en esta consulta, cuando se hace este tipo de ejercicio como son limitados, hay que aprovecharlos y deberían haber afinado más las preguntas", concordó el profesor Aguirre.

Menores

Respecto a la inclusión de menores de 18 años en la consulta ciudadana, los analistas concuerdan que es importante que este segmento participe de procesos democráticos, aunque dentro del ámbito local.

Si bien solamente 49.341 menores votaron en el total de más de dos millones de preferencias, podría ser un primer paso para un mayor interés de los jóvenes en acciones ciudadanas.

"La participación de menores de 18 tiene más efectos positivos que negativos, porque no hay que olvidar que en las últimas elecciones vota alrededor del 40 al 50 por ciento del padrón electoral y la participación de los menores de 30 es más o menos 3 de cada 10. La participación de los jóvenes en procesos electorales normales es muy baja, ahora hay un ambiente distinto sobre el interés por la participación", afirma Araya.

"Es bueno que ellos se expresen, que ejerzan un sentido ciudadano, pero no así para que voten en las elecciones presidenciales. Creo que hay que quemar las etapas de la misma juventud. Ellos tienen otras prioridades, otros objetivos, miran el mundo de manera distinta. Una mayoría de edad tiene cierta lógica", afirma el profesor Vergara de la UNAB.

Plebiscito

¿Qué pasará en el plebiscito de abril? Es una pregunta abierta para quienes estudian este tipo de procesos democráticos, que llaman al mundo político a tener en cuenta estos resultados y a trabajar para responder a las demadas sociales.

La consulta ciudadana tuvo un alto número de participación, pero más de dos millones de votos dentro de un padrón de 13 millones inscritos que maneja el Servel podrían no marcar una tendencia a futuro.

"Puede ser un buen adelanto, como también puede ser un fracaso si es que no se logra llegar a un acuerdo en el parlamento. Los movimientos pueden llamar a no votar y podemos tener mayor abstención que votación. Acá la pelota la tiene ahora el parlamento para llegar a un acuerdo que represente a estos dos millones de votantes. Esto no es una carrera corrida", dice Felipe Vergara.

El profesor Aguirre llama a no confundir los procesos democráticos. "Creo que necesitamos que la gente vote más, pero no podemos abusar del supuesto de que la gente va a votar en todos los temas, el ciudadano vota porque hay preguntas donde hay temas de gran importancia, que era el proceso constituyente".

Para el académico Eduardo Araya, la ciencia política no es predictiva, pero reconoce que este proceso podría marcar una tendencia,

"Es difícil dar un pronóstico, pero creo que podemos esperar mucha más participación. Lo que que me preocupa es que hay un exceso de expectativas respecto a lo que el cambio constitucional puede hacer. No se va a resolver el monto de las pensiones, las constituciones regulan como se ejerce el poder y como se garantizan libertades para las personas. Los partidos políticos tienen que generar más medidas de transparencia, elevar la calidad del debate.".