No son pocos los que hoy ya manifiestan sus preocupaciones por el clima de violencia que aún se observa en Chile, cuando ya comenzó el proceso constitucional que tendrá su punto de inflexión el próximo 26 de abril, en la que los chilenos tendrán que elegir si quieren ó no quieren una Nueva Constitución...
Sí, porque con el panorama observado hace unos días, cuando un grupo de personas muy interesados en la PSU, pero no precisamente en rendirla y menos en esperar ansiosos sus resultados para postular a las carreras ofrecidas por las universidades, sino más bien en impedir que se realizara en forma normal, en donde los puntos más graves fueron la filtración de la Prueba de Historia, que llevó a que fuera eliminada del proceso, agregando problemas a los alumnos que cifraban en ella sus expectativas de ingresar a carreras relacionadas con sus materias y además la repetición de pruebas de Matemáticas, Lenguaje y Ciencias para fines del mes en curso...
Lo que en simples palabras significó que el proceso de la PSU comenzara y se desarrollara de la forma que sin lugar a ninguna duda, la inmensa mayoría de los expectantes alumnos que la iban a rendir, juntos a sus nerviosas familias, nunca se imaginaron en que iba a terminar...
Visto lo anterior, se puede inferir lo ocurrido con la PSU al tema constitucional, en que igualmente aún existen personas, mejor dicho definitivamente no tienen ningún tipo de interés en subirse al tren de los acuerdos, (los graves hechos que pasan a diario, no dejan duda al respecto), surgidos después de enlistar todas las demandas de los chilenos declamadas en forma pacífica, por lo que parafraseando al gran Gabriel García Márquez podríamos preguntarnos...
¿Será lo más indicado para Chile y en particular para los chilenos, estudiar, proponer y DECIDIR, "La Constitución en tiempos de cólera", descontrolada y que nubla la razón...?
PSU
Quiero expresar la indefensión que sentimos como padres, ante el proceso de selección universitaria que fue boicoteado por una minoría de alumnos, que claramente persiguen fines políticos, como lo demuestra los perfiles de quienes dirigen la ACES.
Mi hijo pretende estudiar Licenciatura en Historia en la Universidad Católica de Valparaíso, y durante toda su trayectoria en educación media, su deseo fue dar la PSU de historia, no solo por el puntaje, también para probar sus conocimientos en el área que siempre ha sido su pasión, aparte de eso, está claro que esa prueba era su fuerte, y gran parte del puntaje de admisión estaba centrado en los resultados de la prueba de historia.
Con mucho dolor veo que nadie defiende los derechos de mi hijo, que de seguro no es el único que está en esta situación, y cuando observamos cómo rápidamente la defensoría de la niñez defiende a quienes llamaron a boicotear la prueba y pasar a llevar los derechos de la mayoría de los estudiantes de secundaria, me doy cuenta que sí, estamos indefensos.
Luis Enrique Soler Milla.
Arturo González Zamora.