Era una pareja fundamental del teatro chileno: Bélgica Castro y Alejandro Sieveking, los protagonistas de "Gatos viejos", película de Sebastián Silva que muestra la vida de un matrimonio de ancianos que su hija quiere internar en en un asilo, porque su mamá tiene alzheimer, al igual como Bélgica, quien falleció ayer, a pocas horas de que partiera el dramaturgo, su gran amor.

"Ellos vivían el uno para el otro. Ellos decían que eran absolutamente dependientes uno del otro. Estaban siempre muy pendientes, por eso les preocupaba tanto su separación", dijo a La Tercera, Héctor Noguera.

En una entrevista, realizada también a La Tercera, ambos declararon: "Somos mutuamente dependientes. Pensamos que solos meteríamos la pata. Cuando yo escribo, ella me corrige, me ayuda mucho. Y yo la ayudo como actriz", decía Sieveking. "Para mí es muy bueno que él dirija. Le tengo una fe ciega, le creo todo lo que me dice", agregaba ella.

Gran trayectoria

La intérprete participó en cerca de 200 obras de teatro, entre las que destacan "Fuenteovejuna", "La remolienda" y "Doña Rosita la soltera".

"La pareja emblemática del teatro nacional deja un legado que se mantendrá vivo en la memoria de todo un país, que les agradece su entrega apasionada por la creación permanente. Abrazos a sus amigos, familiares y compañeros de teatro", escribió en Twitter la ministra de las Culturas, el Patrimonio y las Artes, Consuelo Valdés.

Tras su deceso, la Universidad de Chile publicó una pequeña biografía de la actriz: nació el 6 de marzo de 1921 en Concepción y estudió Pedagogía en Castellano en el Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile.

Participó en la creación del Teatro Experimental de esta Casa de Estudios (1941) y perteneció a éste hasta 1971 cuando fundó con un grupo de actores el Teatro del Ángel.

En 1949 fue contratada porla BBC y estuvo un año en Londres.

Fue profesora de Historia del Teatro en la Escuela de Teatro de la Universidad de Chile durante 14 años; de actuación, en la Escuela de Teatro de la Universidad Católica de Chile y en la Universidad de San José de Costa Rica.

Castro fue una de las actrices estrellas del Teatro Experimental de la Universidad de Chile.

Durante su carrera obtuvo el Premio Nacional de Artes de la Representación y Audiovisuales y el Premio Altazor por su rol en la obra "Cabeza de ovni".

La actriz y Sieveking iniciaron su relación en 1961 y juntos participaron en varias obras de teatro, incluyendo "La Remolienda". Se conocieron cuando ella ejercía como profesora de historia del teatro en la Universidad de Chile, y Sieveking, 14 años menor que ella, era su alumno.